Los servicios funerarios costarán un 30% menos con la apertura del nuevo tanatorio municipal que, con siete salas de velatorio, abrirá antes de fin de año en el cementerio de San José. Así lo apunta el concejal de Salud y Consumo, Carlos Sánchez, que entiende que la competencia contribuye a abaratar precios.
Lejos de considerar al Consistorio como competencia desleal a los tanatorios que ya existen, el también portavoz del equipo de gobierno, entiende que “hay que mirar por el ciudadano” y señala cómo las lápidas ya han bajado casi la mitad de precio con la nueva empresa concesionaria del cementerio. “Hoy un precio medio de lápida de mármol puede costar unos 700 euros, frente a los 1.200 que podían cobrar los marmolistas”, dice.
De esta forma, justifica Sánchez las críticas lanzadas por la oposición municipal al concesionar el servicio del cementerio e incrementar las tasas por enterramiento. Tasas que, dice, son de mantenimiento y que vienen a sustituir las obligaciones de los arrendatarios de mantener en buen estado el cementerio. En este sentido, hace hincapié en que no se cobra por el traslado del féretro desde la puerta del cementerio e insiste en poner su cargo a disposición de quien le demuestre lo contrario.
Insiste, además, en que “como administrador público, el propósito de este concejal es que a los vecinos les salga lo más barato posible el servicio del cementerio”. Algo que, señala, “se consigue con la competencia”.
El cementerio volvió a ser protagonista en la última sesión plenaria, donde bastaron los votos del equipo de gobierno para anular la moción de los socialistas que solicitaba una compensación al Ayuntamiento por la subida del IVA a partir de septiembre de los servicios funerarios.
Los socialistas aseguran que las tasas de cementerio se van a incrementar en hasta un 262% y denuncian la concesión del servicio a una empresa privada.
A vueltas con 1 millón de euros
Sánchez mostró en el pleno dos imágenes del cementerio de San José. Una, anterior a la concesión, y otra, posterior, en la que se veía una mejora considerable del estado de las calles y las lápidas.
El cementerio venía a costar al Ayuntamiento alrededor de un millón de euros. La misma cantidad que ahora recibe de la empresa concesionaria. “Antes el Ayuntamiento pagaba por tener un cementerio tercermundista y ahora va a recibir dinero y ha igualado el estado del camposanto al de ciudades similares a Almería”.
No convenció, no obstante, a la oposición que pide al Ayuntamiento que interceda para que no suba el IVA de los entierros.
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