Los trabajadores ofrecen alternativas al despido de 19 empleados de Cespa

Que el divorcio entre el Ayuntamiento de Albox y Cespa -empresa encargada de la gestión de la limpieza- era inevitable, es algo que toda la plantilla de trabajadores de este servicio tenía claro. La huelga en la recogida de basuras realizada el pasado año, debido a retrasos en el pago de las nóminas como medida de presión para que el Ayuntamiento zanjara su deuda con la empresa, cercana a los 8 millones de euros, según fuentes municipales, daba prueba de ello. 

Lo que el responsable de administración local de Comisiones Obreras no comparte es el modo en el que se ha puesto fin a la situación, dejando en el aire el puesto de trabajo de 19 trabajadores de este servicio que se incorporaron a la empresa en años posteriores al 2000, momento en el que se privatizó su gestión. Los 12 empleados que trabajaban para el Ayuntamiento de forma previa a esa fecha, tienen prevista su continuación.

Para el coordinador sindical “hay muchísimas alternativas a la de producir diecinueve despidos”, como por ejemplo que el Ayuntamiento asuma a todos los trabajadores de este servicio sin excepción. 

ERE’s y jubilación

“El Ayuntamiento está obligado a seguir prestando esos servicios. Y esos trabajadores tienen esa expectativa de derecho a ser subrogados en la nueva empresa, el Ayuntamiento. Hay mecanismos como los ERE que no tienen por qué ser extintivos; pueden ser suspensivos”, explica López. En este caso, por medio de un acuerdo entre las partes, los trabajadores podrían turnarse el puesto de trabajo de forma temporal, alternándolo con el cobro de la prestación por desempleo. 

El coordinador de CCOO también baraja la jubilación anticipada de parte de la plantilla de este servicio, que dejará de ser prestado por Cespa el 15 de octubre. Juan López exige que “se adelanten los doce nombres” para “evitar sorpresas que ya han ocurrido en otros ayuntamientos” y ha confirmado que están estudiando posibles huelgas o actos de protesta. Del mismo modo, pide a Cespa “que de la cara” ya que la rescisión, cree, “no se ha hecho sin el conocimiento y me atrevo a decir que sin el consentimiento de la empresa”.

La portavoz del partido en la oposición, Inmaculada del Águila (PP), responsabiliza “únicamente” al “equipo de gobierno” de la situación  y cree que el error se encuentra en que “pensaron que Albox era una ciudad y que necesitaba que como hemos visto no hemos podido pagar”. Del Águila exige al Ayuntamiento “hacerse cargo de estos trabajadores si no son capaces de llegar a ningún acuerdo con Cespa para su reubicación”.