La Junta hacía ayer balance de la labor del SERCLA (Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales) y los datos apuntan a un más que notable incremento de la conflictividad desde la entrada en vigor de la reforma laboral, y también como consecuencia de la crisis.
Si en años precedentes la media de conflictos estudiados por el SERCLA estaba en torno a los 40, este año se sitúan ya por encima de los ochenta (86). Hace dos años se hablaba de un balance de 2 EREs extintivos, mientras que sólo este año, aún por concluir, suman 18, es decir que se han multiplicado por nueve.
Convenios colectivos
En la actualidad están vigentes en la provincia 30 convenios colectivos que afectan a 809 empresas y 13.445 trabajadores. Hace sólo un año estaban acogidas a convenios 6.151 empresas y 84.198 trabajadores, es decir que se ha producido un descenso del 526 por ciento de trabajadores acogidos en sólo un año.
Mientras tanto el SERCLA no da abasto ante la multiplicación de conflictos (más del doble que en años anteriores). A la razón más frecuente para recurrir, la interpretación de los convenios, se han sumado con fuerza las reclamaciones por le negociación a la baja de los salarios.
La mediación del SERCLA, en ese escenario de precariedad, ha servido para evitar 27 huelgas, pero en todo caso la delegada de Economía, Adriana Valverde, tema que los efectos de la reforma dispare la conflictividad.
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