El fuego ha quemado este año más de 847 hectáreas, el doble que el año pasado

Desde el 1 de enero hasta el 15 de octubre, en la provincia de almería han ardido algo más de 847 hectáreas forestales, una cifra que aunque dobla la del año pasado (446,34 hectáreas), está por  debajo de la media de los últimos diez años, que se sitúa en 1.324 hectáreas.

El incendio de Bédar, que se inició el 25 de agosto y afectó a 400 hectáreas, concentra prácticamente la mitad del número de superficie calcinada.

De las 847,7 hectáreas forestales afectadas por los incendios  en la provincia desde el inicio de este año, el 99,41% se corresponden con suelos de matorral (882,4 hectáreas), y el 0,5% con suelo arbolado (4,9 hectáreas).
Los datos que sí han mostrado un incremento respecto a la media de los diez últimos años han sido los relativos al número de conatos, ya que este año se han registrado 70, frente  a los 52,2 de la media.

95 intervenciones
Por su parte, el número de incendios se ha incrementado levemente esta campaña, con un total de 25 siniestros frente a los 24,5 de la media. El número de actuaciones en terrenos forestales también ha subido con un total de 95 intervenciones frente al registro de 76,7.

En el transcurso de la campaña de extinción se han registrado incendios de relevan-cia, como es el caso de Bédar, que motivó la declaración del nivel 2 de emergencia por un cambio de viento que puso en riesgo el núcleo poblacional, que finalmente, gracias a la actuación del dispositivo Infoca no se vio afectado. Otro de los más significativos esta campaña en Almería fue el siniestro de Enix, el 1 de mayo, que afectó a un total de 212 hectáreas.

En cuanto a las causas que han motivado los incendios, destacan las negligencias, que ocupan un 35,8% de los siniestros investigados hasta la fecha, los incendios intencionados, un 16,3% del total registrado, seguido por los debidos por causas naturales, con un 8,7% de los acontecidos y, por último, los accidentales con 1%.

En un 4,3% de los casos no se pudo establecer una hipótesis fiable sobre el origen de los incendios, mientras que en un 33,7% de los casos aún permanecen en investigación.