La provincia de Almería acoge en la actualidad a más de 88.000 ciudadanos mayores de 65 años y, aunque sus condiciones socioeconómicas son muy diversas, todos son objetivo potencial de delincuentes especializados en la tercera edad. Cogoteros, descuideros, tironeros y estafadores buscan un botín fácil en el desconocimiento de las nuevas tecnologías o, simplemente, en las menores facultades físicas de sus víctimas.
Para prevenir los delitos y garantizar la seguridad de los vecinos, la Policía Nacional desarrolla un programa de “cercanía a los ciudadanos” conocido como Plan Mayor-Seguridad, destinado esencialmente a personas de la tercera edad. El jueves estrenó una nueva temporada de la campaña con una visita a las instalaciones de la Comisaría Provincial de Almería. “Buscamos ampliar las actividades del Plan Mayor-Seguridad no sólo dando consejos a los ciudadanos sino también enseñándoles cómo trabaja el Cuerpo Nacional de Policía, de qué recursos dispone y en qué podemos ayudarles”, explica Pedro García, responsable del departamento de Participación Ciudadana.
Al encuentro asistieron 15 personas pertenecientes a asociaciones de mayores de Oliveros-Mediterráneo, que ya entregaron un reconocimiento al inspector durante los actos de Los Santos Ángeles Custodios por su labor de sensibilización en el colectivo. En la reunión participó igualmente el comisario jefe provincial, Custodio Hidalgo, que impartió una charla centrada “la importancia de la colaboración ciudadana”.
Bancos y bares
Aunque las estadísticas delincuenciales en la provincia de Almería muestran un descenso general de los índices en los últimos años, los mayores se enfrentan a delitos relativamente frecuentes como los asaltos en cajeros o sucursales bancarias. Los cogoteros roban a sus víctimas cuando portan cantidades de dinero en efectivo. Además, la tercera edad es el objetivo preferido para los descuideros, expertos en hurtos en establecimientos o en grandes aglomeraciones de personas, y para los tironeros (fundamentalmente mujeres de avanzada edad).
El inspector Pedro García subraya la necesidad de prevenir para evitar los delitos, “prestando atención a los objetos personales en cafeterías o tiendas” o “colocando el bolso hacia el interior de la acera y no hacia la calzada, donde pueden darle un tirón en una moto o bicicleta”. Además, aconseja no forcejear nunca con los ladrones, ya que se pueden sufrir graves lesiones. Y si la prevención falla, denunciar inmediatamente.
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