Tres empresas hortofrutícolas del Campo de Níjar se han sumado a la iniciativa puesta en marcha por Biomip para retirar las colmenas de abejorros una vez concluida su función en el invernadero.
Coprohníjar, Biosabor y Campojoyma han optado por incorporar a sus habituales y muy exigentes protocolos de actuación en materia de higiene rural el Programa de Gestión de Colmenas Usadas creado por Biomip, que soluciona un problema bastante complejo, toda vez que las colmenas de insectos polinizadores contienen residuos orgánicos, plástico y cartón. Una coincidencia que representa un dilema a la hora de destinarlas a los habituales canales de reciclaje.
Coprohníjar
El vicepresidente de Coprohníjar, Juan Segura, considera que este es un paso más en las inquietudes que nacieron con esta cooperativa, la cual fue pionera en el uso del control biológico, allá por los comienzos de los años 90. Por eso, cuando Biomip planteó una solución para las colmenas en desuso encontraron en esta alternativa un eslabón más en la cadena del compromiso ambiental que ha sido seña de identidad de Coprohníjar.
En ese sentido, recuerda que esta cooperativa, líder en el Campo de Níjar, siempre tuvo conciencia de que se encontraba situada en un entorno natural privilegiado, por lo que apostó por mantener un alto grado de responsabilidad ambiental.
Paralelamente a esta observación, el vicepresidente de Coprohníjar destaca el éxito obtenido con la implantación del control biológico en tomate, que se ha puesto de manifiesto este año con la ausencia casi absoluta de Tuta y de mosca blanca.
En su opinión, “este hecho puede considerarse una especie de segunda revolución verde, comparable a lo que supuso en su día el riego por goteo”.
Por su parte, Francisco Belmonte, gerente de Biosabor, ha decidido también firmar el acuerdo con Biomip para la retirada de las colmenas tras su periodo de actividad, que está cifrado en términos generales para finales del mes de noviembre.
Belmonte reconoce que las colmenas usadas representaban un verdadero problema dentro de su riguroso sistema de recogida de residuos de cdara al reciclaje. En total, pueden ser unas 2.000 colmenas las utilizadas cada campaña en Biosabor, lo que da idea de la envergadura del problema.
Biosabor es una firma modélica en cuanto a la aplicación de control biológico, que opera desde el propio semillero. A partir de ahí, la empresa que dirige Francisco Belmonte mantiene una rigurosa política de control de residuos, destinando una parte de ellos a la producción de humus y preocupándose por encontrar aplicaciones a la totalidad de su producción.
Campojoyma
Para el responsable de Campojoyma, Francisco Jesús Montoya, el acuerdo con Biomip permite mantener una de las preocupaciones esenciales de esta firma, especializada en producción ecológica. Montoya subraya la importancia de abordar el reciclaje para una empresa que lleva diez años de esfuerzos en la utilización de materiales biodegradables en el campo y observando escrupulosamente las exigencias del producto ecológico. Campojoyma consume al año más de dos mil colmenas. Desde su nacimiento Campojoyma ha mantenido un alto nivel de compromiso social con el medio ambiente y con el entorno cultural de Níjar.
El gerente de Biomip, Manuel Pérez, ha valorado muy positivamente la firma del acuerdo de colaboración por parte de estas tres empresas que reúnen, de un lado, la más veterana e importante de la comarca, junto a dos empresas jóvenes, pese a la experiencia de sus artífices, que han apostado por abrir nuevos caminos para la agricultur
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/3/provincia/34055/coprohnijar-biosabor-y-campojoyma-se-suman-a-la-propuesta-de-biomip