Las obras de las carreteras por las lluvias, listas para la primavera

Hace ahora dos meses que en las conversaciones de la mayoría de los almerienses las terribles inundaciones que habían azotado al Levante, y que acabaron con la vida de cuatro personas, eran protagonistas. Las televisiones -locales, nacionales e, cinluso, internacionales-, se hacía eco del desastre que la gota fría había causado y radios y periódicos se llenaban de testimonios, sesudas explicaciones sobre lo ocurrido y de los inevitables cruces de acusaciones entre administraciones públicas.
Ahora, poca gente habla de aquello, poca gente si exceptuamos a los damnificados que siguen luchando por devolver la normalidad a sus casas y a sus vidas. Eso sí, para ayudar a ello no faltan iniciativas solidarias de ayuntamientos y asociaciones y movimientos ciudadanos.
Y mientras, las administraciones continúan trabajando, sin tanto ruido, pero con eficacia.
Así, las obras de emergencia que desarrolla la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía alcanzan prácticamente un 60% de ejecución, e incluso la más compleja de ellas, la de la carretera A-350 entre Huércal-Overa y Pulpí tiene, desde el pasado lunes, las máquinas trabajando.
También llevan buen ritmo los trabajos que realiza la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente. Así, haste este pasado miércoles, 5 de diciembre, ha concluido siete de las 15 obras de emergencia aprobadas. Otras cinco están a punto de finalizar, dos están en marcha y solo una, la limpieza y adecuación de la desembocadura del río Aguas a su paso por Mojácar, está pendiente de inicio.
Lo mismo se puede decir de las obras dependientes de la Diputación, que, según su responsable de Fomento, Miguel Ángel Castellón, las nueve obras incluidas en su plan de actuación de emergencia estarán en marcha antes de Navidad. De hecho, las cuatro correspondientes a la primera fase ya están cloncluidas y las cinco de la segunda, licitadas o en fase de licitación. Según afirma Castellón, para el próximo febrero, estarán todas acabadas y los cuatro millones de euros, invertidos.

Pueblo Laguna vuelve poco a poco a la normalidad

Dos meses, 60 días de trabajo, de quitar barro, de adecentar calles y casas, de reponer infraestructuras. Todo el que pudo ver cómo quedó Pueblo Laguna y Puerto Rey, las dos urbanizaciones de Vera más afectadas por las inundaciones, comprenderá que la labor que Ayuntamiento y vecinos tenían por delante no era nada fácil.
Así, tal y como muestran las imágenes que acompañan este texto, la normalidad va volviendo muy despacio. Los restos de barro y de maleza son perfectamente visibles aún en las calles de Pueblo Laguna y las pistas del complejo deportivo de Puerto Rey, aunque ya sin agua, siguen impracticables.
Mejor va el puente que une el paseo marítimo de Vera con Pueblo Laguna, una de las intraestructuras más afectadas por la ríada, y la zona junto a la laguna se encuentra ahora acotada y a la espera de su acondicionamiento.
Caminos y cauces
Precisamente, la Consejería de Agricultura, tiene en fase de ejecución la retirada de vegetales, tierra y lodos y la reposición de defensas en el río Antas a su paso por Vera. De hecho, esta actuación junto a la reconstrucción del encauzamiento de la rambla Jucainí, en Cuevas son las dos que actualmente se están ejecutando, ya que todas las demás (12 en total en ramblas y cauces), excepto la desembocadura del río Antas en Mojácar que está pendiente de inicio, ya se han concluido o están a punto de hacerlo.