El temporal de lluvias del mes de septiembre arrasó grandes zonas del levante almeriense y abrió grietas más allá de los socavones en puentes y carreteras. El debate político osciló sobre las responsabilidades en la limpieza de las ramblas, donde la acumulación de desechos provocó daños mayores en la riada.
Mientras el presidente de la Diputación Provincial de Almería y el subdelegado del Gobierno demandaban la intervención de la Junta para adecentar las canalizaciones como medida preventiva, el Ejecutivo andaluz ‘reparte’ la carga entre todos los actores implicados y defiende su inversión.
En el mes de diciembre, los diputados andaluces Rosalía Espinosa y José Cara (PP) interrogaron a la Junta sobre las medidas para evitar riadas en la provincia. En la respuesta emitida esta semana, a la que ha tenido acceso LA VOZ, la Consejería de Medio Ambiente asegura que las competencias están compartidas con los ayuntamientos y los propios agricultores. ¿En qué sentido?
Según explica el área de Luis Planas, la Junta sólo es competente “en la adecuación de cauces, es decir, mantener sus condiciones hidráulicas para que los cauces y sus zonas adyacentes cumplan con su cometido de evacuación de las avenidas ordinarias”. En cuanto a la limpieza, “la competencia es de los ayuntamientos en la retirada de basuras y escombros, por ser asimilables a residuos sólidos urbanos”.
Además, Medio Ambiente señala que “los plásticos agrícolas, que constituyen uno de los factores que más contribuyen a entorpecer la evacuación de las aguas de las cañadas, ramblas y barrancos del Poniente almeriense, han pasado a ser responsabilidad de los consumidores”; esto es, de los agricultores.
“Falta de interés”
Sin embargo, la respuesta no satisface a los populares que piensan que la Junta trata de echar balones fuera. Según explica la parlamentaria almeriense Rosalía Espinosa, “la Junta tiene las competencias en la limpieza de la maleza y los residuos agrícolas”, mientras los ayuntamientos las tienen sobre “los escombros y la basura sólo en el tramo urbano”.
Para Espinosa, la Consejería de Medio Ambiente demuestra una “falta de interés” en este asunto que considera “preocupante”, teniendo en cuenta que Almería es “la provincia con más puntos de riesgo de inundaciones de la comunidad”, según el Plan de Prevención de Avenidas e Inundaciones en Cauces Urbanos Andaluces (julio de 2002).
Municipios como Vera o Pulpí también demandaron a la Junta un paso al frente en el mantenimiento de cauces. “El problema de las inundaciones exige de actuaciones anteriores de las que carece la zona, como óptimas canalizaciones, alcantarillado y limpieza de las ramblas”, señaló en octubre la asociación ‘Veraplayazul’. Durante el temporal registraron una acumulación de precipitaciones superior a los 200 litros por metro cuadrado.
La Consejería se defiende y aporta un completo informe sobre actuaciones en una treintena de “puntos de riesgo”. Según Luis Planas, la Junta ha gastado 12 millones en la “delimitación de las zonas inundables”. En Almería se elaboraron dos estudios para Levante y Poniente. “Se ha realizado una importante labor paliativa”.
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