La residencia debe 8 meses de sueldo a sus trabajadores

Siguen en sus puestos de trabajo porque “los mayores son lo primero”, pero a los 25 trabajadores de la Residencia de Personas Mayores Alcalde Bartolomé Sánchez Moreno, de Oria, se les está acabando la paciencia y las fuerzas.

La empresa Geriátricos Urbanos SL que gestiona mediante concesión esta residencia, perteneciente a la red de centros de la Consejería de Salud y Bienestar Social, debe a sus empleados 8 meses de sueldo, lo que ha llevado a estos trabajadores ha poner en marcha diversas iniciativas, desde una demanda salarial, hasta un acto de conciliación. Según ha relatado a LA VOZ una trabajadora, las promesas del gerente han quedado en nada. “Pero hasta ahora nunca nos habíamos planteado medidas de presión que pudieran perjudicar a los mayores”, señala.

Hipoteca, luz, agua...
Y lo de hasta ahora va en serio, ya que el abogado que les lleva la reclamación salarial ha iniciado los trámites para convocar una huelga a final de mes. Ocho meses sin cobrar “excepto 500 euros que se nos abonó en diciembre” está complicando la vida de estos 25 trabajadores, ya que “no podemos hacer frente a nuestras hipotecas, los recibos de la luz, el agua... No nos falta un plato de comida porque tenemos familia y nos pueden ayudar”, explica.

Desde la Delegación de Salud y Bienestar Social aseguran que se ha abonado ya a la concesionaria los servicios prestados hasta el pasado mes de octubre, por lo que, aunque reconocen que no están al día en los pagos, insisten en que “los impagos de la empresa a sus trabajadores nada tienen que ver con una supuesta deuda por parte de la Junta de Andalucía, ya que se han abonado pagos a la concesionaria del centro con posterioridad a que ésta dejara de pagar a sus trabajadores”.

El gerente de la residencia, Pedro Luis Béjar, que, según los trabajadores, ha culpado a la Junta de la falta de liquidez de la empresa y de los retrasos en el abono de las nóminas, se comprometió a pagar y puso como fecha límite el 5 de febrero, pero la realidad es que los trabajadores aún no han cobrado.

Esta residencia cuenta con 45 plazas, de las que 22 son de asistidos y 23 para mayores con graves trastornos de conducta de la comarca del Almanzora.