Esta mañana la delegada territorial de Empleo, Adriana Valverde, ha dado a conocer los datos relativos al balance de 2012 en materia laboral. Y ha culpado a la reforma laboral del Gobierno central de la pérdida de empleo que ha sufrido la provincia y del empeoramiento de las condiciones de trabajo de los empleados de la provincia.
Así, el año pasado se perdieron en la provincia 2.500 puestos de trabajo y se registraron 252 EREs que afectaron a más de 1.800 trabajadores. 20 de ellos fueron extintivos, con lo que 413 trabajadores fueron despedidos. Estos datos suponen un aumento del 76%.
Además, más de la mitad de las reclamaciones que hicieron los empleados a las empresas estaban motivadas con el salario; y crecieron un 16% las motivadas por el despido del trabajador.
Un círculo vicioso
Cifras que para la delegada de empleo demuestran las consecuencias negativas de la reforma laboral del gobierno central, ya que “menos sueldo y más paro supone menos poder adquisitivo de las familias y menos capacidad de consumo; con lo que no hay demanda de servicios y productos. En consecuencia, no hay ofertas de trabajo para cubrir las necesidades de los diferentes sectores. Así que es un círculo vicioso del que difícilmente saldremos si el ejecutivo de Mariano Rajoy no cambia sus políticas”.
Por otra parte, en 2012 bajaron a 43 los convenios colectivos provinciales vigentes, frente a los 57 de 2011. Eso supuso que el número de trabajadores cubiertos haya pasado de 84.470 a los 40.343 del año pasado.
Audio: Adriana Valverde, delegada territorial de Empleo
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