Los trabajadores del hotel Puerto Salud anuncian huelga

Los trabajadores del hotel Puerto Salud, ubicado en el Puerto deportivo de Aguadulce, anuncian que, si para el miércoles de la próxima semana, la empresa Kross Hotel no paga la deuda que mantiene con ellos irán a la huelga indefinida.

Según ha explicado la delegada de personal del Puerto Salud, Carmen López, “son ya cinco meses sin cobrar y la situación es insostenible”.

López afirma que todos los trabajadores han interpuesto la correspondiente denuncia ya de manera individual y que ya ha habido una reunión al amparo del Sercla (Sistema de Resolución Extrajudicial de Conflictos Colectivos Laborales de Andalucía), “que no ha servido para nada hasta el momento”. Así las cosas, y dando a la empresa “un tiempo prudencial para que responda”, han decidido darle hasta el miércoles próximo para pagar lo adeudado.
Los trabajadores, en su mayoría mujeres, se han concentrado en varias ocasiones a puertas de su centro de trabajo -en el Puerto Deportivo- para reivindicar el pago de sus nóminas.

La situación comenzó en el mes de noviembre. Puerto Salud pertenecía al grupo de hoteles de Miguel Rifá; pero la adquirió una empresa son sede social en Barcelona, Kross Hotels. Fue cuando ésta se hizo con el hotel, cuando los trabajadores dejaron de cobrar y ello ha llevado a alguno de ellos a situaciones muy complicadas, con notificaciones judiciales de embargo por impago de sus hipotecas.

Según Carmen López, representante sindical de los trabajadores, cuando Citymar vendió ya les “dejó a deber la nómina de noviembre” y explica que los actuales propietarios durante estos meses han estado “poniendo excusas de cambios de banco y demoras de trámites” para no pagar los salarios a los 27 trabajadores.

Hace un par de meses, la empresa se comprometió a pagar al menos media nómina y a ir saldando la deuda poco a poco, según contó a LA VOZ DE ALMERÍA la directora del hotel, Ana Martínez; pero eso no ha sucedido. Kross Hotels le aseguraba entonces que en diez días la deuda quedaría saldada y han pasado ya dos meses.  Martínez explicaba que la propiedad de hotel le argumentaba que había problemas de cambios de domiciliaciones bancarias, lo que también había afectado a los ingresos de algunos de los 40 usuarios, que no habían podido pagar por su estancia en las instalaciones. Pero esto se solucionó y los residentes están pagando ‘religiosamente’ su estancia.