Nuevo capítulo del enfrentamiento entre los vendedores ambulantes y el concejal de Salud y Consumo, Carlos Sánchez, por el traslado del mercadillo de Plaza de Toros en el barrio de Araceli.
Un capítulo que arrancaba a primera hora de la mañana con la llegada a la calle Imperio Argentina, nueva ubicación del mercadillo de los viernes, de sólo una treintena de vendedores ambulantes que viendo la ausencia de la gran mayoría de los compañeros -hay un total de 182 licencias otorgadas- optaron por no montar y dejar vacío, solo con la presencia de la churrería, este mercadillo en el día de su estreno.
A pesar de la nula presencia de vendedores en el mercadillo, tampoco acudieron de forma masiva a la concentración que entre las 9,00 y las 13,00 horas había convocado la Federación de Comercio Ambulante (FECOAM) en la Plaza Vieja para protestar por el traslado y solicitar que se abriera una vía de negociación.
Con lluvia de por medio, con el traslado de la Junta de Gobierno de la Plaza Vieja al Preventorio (estaban cambiando la iluminación de la sala habitual de reuniones), lo cierto es que la concentración fue menos multitudinaria de lo esperado, tanto es así, que el número de policías locales que controlaban la movilización era mucho más alto que el necesario para los manifestantes.
Con la cantidad de gente que fuera, lo cierto es que la protesta se desarrolló con un objetivo principal según el presidente de FECOAM, Rogelio Gómez, que “pedimos al equipo de Gobierno que abra la mesa de diálogo” y afirmaba que tienen “derecho a manifestarse” y que lo que quieren es que “negocie”.
Confederación
Además solicita que “la confederación de comerciantes ambulantes Cindala se postule y que se abra la mesa de negociación con el Ayuntamiento”.
Desde el equipo de Gobierno el concejal de Salud y Consumo, Carlos Sánchez, no se muestra demasiado dispuesto a volver a sentarse con los comerciantes.
Lo que sí hubo a lo largo de la mañana es un cruce de acusaciones sobre quien coacciona a quien para que los vendedores monten o se manifiesten. Así, mientras Gómez asegura que Carlos Sánchez ha intentado parar la movilización coaccionando a los vendedores con su intención de pasar lista por parte de la Policía Local y abrir expedientes sancionadores, el concejal aseguró que “se han enviado unos pasquines, algunos de ellos a las viviendas de los vendedores que dice que si no van a la concentración es que se está a favor del traslado, y eso es una coacción velada ¿no?”.
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