Alerta, carabelas portuguesas

Las carabelas portuguesas amenazan las costas almerienses. Pescadores y submarinistas han avistado en los últimos días ejemplares de estas medusas especialmente tóxicas frente a las costas de Garrucha y Mojácar, en el Levante almeriense, y en la franja marítima entre Adra y Motril (Granada).

Se trata de medusas de tonos azulados y violetas, con unos tentáculos de varios metros y una toxicidad elevada. Aunque su hábitat más frecuente es la costa atlántica, en los últimos años se han producido avistamientos puntuales frente a las costas de la provincia de Almería, en lugares tan dispares como Almerimar (El Ejido), Los Genoveses (Níjar) o la propia bahía de Almería.

Durante los meses de marzo y abril, las carabelas portuguesas (Physalia physalis) han provocado el cierre preventivo de algunas playas onubenses y gaditanas. Aunque todavía el número de bañistas es reducido, el peligro de picaduras para las personas ha llevado a las autoridades a prohibir temporalmente el baño.

Intervención

Ante esta situación, el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Almería sigue con atención la evolución de los bancos de medusas y quiere anticiparse a la aparición de especímenes. Según informa el portavoz del equipo de Gobierno, Carlos Sánchez, “se tiene conocimiento de la localización de este tipo de medusa en la costa de la provincia, pero podemos decir con total seguridad que todavía no hay en la capital”.

Carlos Sánchez añade que “existe un sistema operativo montado junto al Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente y la Junta de Andalucía para actuar inmediatamente en caso de que se alertara de la llegada a la ciudad de estas medusa”. Por su parte, las delegaciones territoriales de Salud y Medio Ambiente en Almería aseguran que no tienen competencias en este ámbito y apuntan a la Subdelegación del Gobierno.

El Instituto Español de Oceanografía analiza la evolución de las poblaciones de medusas, sus peligros y su extensión. Uno de sus estudios señala el traslado de las carabelas portuguesas desde las playas de Doñana  hasta el mediterráneo.

“Durante los siguientes meses, estas medusas han continuado adentrándose en el Mediterráneo y comenzaron a aparecer esporádicamente en la costa de Almería, Murcia y Alicante durante el mes de abril”, señala un artículo del investigador Ignacio Franco. “En estas fechas es normal también encontrar en las playas ejemplares de Velella velella y de Pelagia noctiluca”. Sin embargo, señala que estos avistamientos “son algo habitual que ocurre todos los años en mayor o menor medida”.