La Iglesia de Santa María de Albox sigue dando muestras del visible deterioro al que se enfrenta. El último desprendimiento se ha producido hace escasos días, en la noche del pasado viernes. Una cornisa situada junto a una de las ventanas de la fachada se vino abajo sin que, afortunadamente, ningún vecino circulara en ese momento por el tramo de vía pública afectado. La zona fue acordonada poco después de que se produjera la caída.
Este desprendimiento se suma al que ya se produjo en marzo de 2012, hace poco más de un año. Entonces, los restos del edificio que cayeron pertenecían a la parte de la iglesia situada en la calle Sacristía, en el lado opuesto a la cornisa que se ha desprendido durante el fin de semana. Una muestra de que el mal estado de este inmueble no es parcial, sino que afecta a gran parte de su estructura y es visible en sus paredes interiores y exteriores.
Rehabilitación
Desde hace dos años, los vecinos de Albox se han organizado mediante la Asociación Pro-Restauración de la Iglesia de Santa María para la recaudación de dinero destinado a tal fin. Las cofradías y otras asociaciones de la localidad también han contribuido a la consecución de este objetivo con la celebración de diversos actos, aunque la mayoría de las esperanzas están depositadas en el proyecto de rehabilitación que el Ayuntamiento de Albox está tramitando mediante los Planes Provinciales de 2013.
El párroco de la iglesia ya manifestó su inquietud el pasado año tras los primeros desprendimientos, cuando expuso su esperanza de que la rehabilitación de la iglesia diese comienzo “antes del próximo invierno”. Finalmente esos trabajos han llegado en el plazo deseado por el responsable de la parroquia y ahora se ha vuelto a repetir la caída de parte de la estructura del edificio. El mismo párroco señaló entonces que la iglesia fue construida con ciertas deficiencias que ahora le están pasando factura y que agravan aún más los efectos que el paso del tiempo tiene en este tipo de edificaciones.
En cuanto al inicio de los trabajos de rehabilitación, desde el Ayuntamiento de Albox aseguran que se encuentran “esperando la adjudicación” de los trabajos por parte de la Diputación Provincial, a la que ya se le entregaron “todas las garantías y los documentos necesarios” para que se lleve a cabo.
El alcalde, Rogelio Mena, reconoce que el último desprendimiento “preocupa” en el Consistorio albojense. De hecho, según Mena, ayer pidió a la Diputación Provincial “acelerar” la tramitación de la adjudicación de este proyecto que ronda los trescientos mil euros, en el caso de que esto fuera posible. La fortuna ha querido que esta espera no haya tenido peores consecuencias que las ya sufridas por la iglesia.
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