El Gobierno fijó 8,2 millones en 2011 para mantener Calar Alto hasta 2018

El Consejo de Ministros del Gobierno central autorizó en mayo de 2011 al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) a adquirir compromisos de gasto con cargo a ejercicios futuros, por importe de 8,2 millones de euros para el periodo 2014-2018, correspondientes a una adenda al convenio mantenido con la institución alemana Max Planck para el desarrollo del Observatorio de Calar Alto.

En la referencia del Consejo de Ministros de mayo de 2011, cuando aún estaba el PSOE en el Gobierno, se señala que el actual convenio suscrito entre la Sociedad Max Planck y el CSIC concluye el 31 de diciembre de este año. “Dado que la programación de la actividad científica del centro, de los recursos humanos y del diseño de la instrumentación exige un periodo de tiempo dilatado, en diciembre de 2010 se rubricó una adenda a dicho convenio para la operación del observatorio durante el periodo 2014-2018. Ambas partes renovaron así su compromiso para mantener el centro en la primera línea de la investigación científica en los próximos años”, se puede leer textualmente en la referencia del Consejo de Ministros del Gobierno central.

Crédito necesario
“Dado que los gastos para ejercicios futuros se extienden a más de cuatro años y según dispone la Ley de Agencias Estatales, es necesaria la correspondiente autorización del Consejo de Ministros para que dicha adenda sea efectiva y, de este modo, sea posible comprometer el crédito necesario. En total, la aportación global del CSIC entre 2014 y 2018 será de 8.217.000 euros”, recogía el Ejecutivo central.

A pesar de ello, el futuro del centro ha estado en cuestión en los últimos meses y, según fuentes cercanas al Observatorio de Calar Alto, aún lo sigue estando, hasta que no se aclare si se producen o no los recortes presupuestarios de los que se ha estado hablando. Por un lado, hay quien dice que es el CSIC quien quiere realizar “drásticos” ajustes que podrían poner en peligro a este importante centro, mientras que otros aseguran que es el socio alemán el que no está convencido de seguir presente en Calar Alto, entre los que se incluyen miembros del Gobierno central y del Partido Popular. 

Hace unos días se informaba, a través de Europa Press, de que la parte alemana y la española habían alcanzando un acuerdo que garantizaba la existencia del Centro Astronómico Hispano Alemán de Calar Alto hasta 2018.
Desde el Consejo Superior de Investigaciones Científicas se ha señalado a LA VOZ que el documento que se firmó a finales de 2010 fue “una declaración de intenciones, pero que el acuerdo no estaba cerrado y que había que volver a hablar antes de 2014” para, entre cosas, especificar la financiación del centro”. Según fuentes del CSIC, fue el primer paso para lo que está haciendo ahora.

El actual director del Observatorio de Calar Alto, David Barrado, ha insistido en que a finales de 2010 ya se firmó el acuerdo que garantizaba la continuidad del centro, aunque comenta que antes de 2014 los socios tenían que volver a hablar para discutir el presupuesto.

“Renuevan su compromiso”
“El l2 de diciembre de 2010 la Sociedad Max Planck y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas han firmado el acuerdo para la operación del Observatorio de Calar Alto durante el periodo 2014-2018. Ambas partes renuevan su compromiso con el Centro Astronómico Hispano Alemán para mantener el centro en la primera línea de la investigación científica en los próximos años”, informaba en su día el propio observatorio a través de una nota que aún se puede leer en su página web.

Negociando la parte “blanda” del acuerdo firmado”

Desde el Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA), a través de quien gestiona el Observatorio de Calar Alto el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), se ha señalado a LA VOZ que ante la rubrica del convenio firmado en 2010 el socio alemán ya pidió una reducción presupuestaria y manifestó su intención de no seguir a partir de 20118. “Por ello se pasó de cuatro a tres millones de euros la inversión, estableciéndose además el 50% como la aportación de cada socio”, ha señalado Matilde Fernández, presidenta del IAA. “Ahora es el CSIC quien alega motivos presupuestarios para realizar más recortes, aunque  éste lo desmienta. Quiere que se pase de los cuatro millones iniciales a uno”, ha comentado.

Por otro lado, según el fuentes del Observatorio, aunque se estableció un porcentaje de un 50% las cantidades concretas  son renegociables y “en eso están ahora las dos pastes”.

No de hoy para mañana
“Lo que está claro es que Calar Alto no puede cerrar de hoy para mañana, sino que se tardaría un tiempo en trámites administrativos, despidos y demás”, ha señalado Fernández.

Lo que tampoco parece estar garantizado es el futuro de David Barrado como director del observatorio. “Los dos socios se han reunido con él para decirle que no quieren que siga, el problema es cómo materializar ese despido o renuncia”, ha dicho.

Según Fernández, continua la actividad normal en el observatorio. “Y lo hace con un pequeño remante que hay fruto de las medidas de ahorro que se pusieron en marcha en 2010, ya que aún no ha llegado ninguna transferencia de este año”.