El tanatorio-crematorio abrirá sus puertas a lo largo de este verano

Durante los meses de verano quiere el concejal de Salud y Consumo, Carlos Sánchez, que abra sus puertas el nuevo tanatorio-crematorio de la capital almeriense y que llega de la mano del Ayuntamiento a través de la empresa concesionaria del servicio de cementerios ASV Funeser.

Según explica el edil, “el edificio se encuentra prácticamente acabado” y actualmente los trabajos que se están realizando “son los últimos detalles de obra menor” con lo que espera poder cumplir con ese plazo marcado de arranque durante el verano.

Según Sánchez el horno crematorio está ya colocado y explicaba que “los filtros también están puestos” asegurando que “el horno no tiene forma de funcionar que no sea utilizando dichos filtros”.

Cabe recordar que durante todo el proceso previo al inicio de las obras se creó una plataforma por parte de los vecinos de la zona contraria a esta instalación por su cercanía a las viviendas, colegios y hospitales, y uno de los principales argumentos eran las dudas sobre el tipo de filtros que se iban a colocar en el crematorio.

De momento las obras siguen su curso y habrá que esperar a ver si se cumplen con los plazos establecidos. Mientras, el Ayuntamiento aprobaba su adhesión a la Asociación Nacional de Entidades y Empresas Funerarias con el objetivo de “entrar en contacto con otros ayuntamientos y entidades que también se dedican a los servicios funerarios” y sobre todo, destacaba Sánchez el respaldo jurídico que dicha asociación puede prestar al Consistorio de la capital en estos servicios.

Obras
Cabe recordar que las obras para construir este edificio de tanatorio-crematorio arrancaron en octubre del año 2011.
Estas nuevas instalaciones, que se ubicarán en la zona norte del camposanto, tendrán una superficie construida de 4.561 metros cuadrados, para lo que se realizará una inversión de 4.218.000 euros, que sufragará la empresa concesionaria, ASV, tal y como establece el pliego de condiciones.

El nuevo tanatorio-crematorio dispondrá de dos hornos crematorios, siete salas de velatorio, una capilla de 275 metros cuadrados, una sala aconfesional, sala de tanatopraxia, dos salas de despedidas, así como tres despachos de administración y una cafetería.

Asimismo, se habilitarán 118 nuevas plazas de aparcamiento, lo que facilitará el acceso al edificio que se encuentra en fase de finalización.

Una vez que el nuevo edificio esté totalmente culminado y comience todo el proceso de cremaciones, el Ayuntamiento a través de la concesionaria, se convertirá en una empresa más de gestión de los servicios funerarios ofertando todas las opciones, ya que, desde que se aprobara la nueva ordenanza, ya se está realizando el servicio de traslado del féretro, colocación de las lápidas, o el de mantenimiento de los enterramientos.