Las cooperativas andaluzas celebraron ayer su Asamblea General y los datos del último ejercicio les permiten lanzar un mensaje de optimismo en medio de la crisis generalizada. Son un sector que sigue creciendo (un 4 por ciento en el último año) y generando riqueza y empleo en su entorno.
El presidente de la Federación Andaluza de Empresas Cooperativas Agrarias, Jerónimo Molina, cree tanto en el modelo que ayer aseguraba que el futuro de Andalucía “pasa precisamente por la modernización del sector agroalimentario y, concretamente, de las estructuras cooperativas”.
Y lo cierto es que los datos le dan la razón porque en el último año han operado 665 cooperativas asociadas a FAECA, que agrupan a casi 270.000 socios agricultores y ganaderos que propiciaron en ese último año una facturación de 4.565 millones de euros, con un crecimiento superior al 4 por ciento y que supone caso el 37 por ciento del total del cooperativismo en todo el país.
Quien tampoco escatimaba ayer elogios hacia las cooperativas era el consejero de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente,, Luis Planas, que acudió a laclausura de la asamblea y que resaltó la importancia de las cooperativas agroalimentarias en el conjunto de la economía andaluza y en particular en el desarrollo del campo.
Líderes en Europa. Planas también recurrió a los datos, en su caso para destacar el papel esencial de las cooperativas agrarias en el liderazgo andaluz en los mercados de frutas y hortalizas, que son líderes indiscutibles en Europa y que acaparan más del 40 por ciento de la facturación del conjunto de las cooperativas españolas. incluyendo en ese análisis el papel protagonista del aceite de oliva.
La Federación de Cooperativas, en la que Almería tiene un papel destacado por la potencia de su sector hortofrutícola, se ha marcado una serie de retos de cara al presente año y situa en primer lugar e trabajo a realizar para conseguir la mejor reforma posible de la Política Agraria Comunitaria (PAC), tanto en Bruselas como en su posterior desarrollo en España, de modo que se mantengan las ayudas en los niveles actuales, se apueste por la integración comercial de la oferta, se mejoren los mecanismos de gestión de mercado y se establezcan exenciones a las normas de la competencia.
Lo comercial. Para las cooperativas es importante el desarrollo de normas como la Ley de la Cadena Alimentaria o la de Integración de Cooperativas, normas esenciales para buscar el equilibrio en la cadena de valor y conseguir mejorar las rentas de los productores. Con ello, las cooperativas ganarían también poder en las negociaciones con la gran distribución.
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