La Rural se compromete a retirar comisiones “en cuanto se pueda”

Juan de la Cruz Cárdenas Rodríguez fue ayer fiel a su filosofía de trabajo y no ocultó la realidad de los problemas surgidos en el último año, una sinceridad que le llevó a reconocer como ‘dolorosa’ la decisión de aplicar comisiones a los clientes “porque está fuera de nuestra filosofía y de nuestra idea de actuar”.
Por eso expresó el compromiso de eliminarlas en cuanto la compleja situación actual se normalice. Cárdenas aseguraba ante los 268 compromisarios que ayer acudieron a la Asamblea General que la caja, como el conjunto de la sociedad, ha atravesado tiempos “tremendamente difíciles” tras las exigencias de provisiones del Gobierno o la supresión de las cláusulas suelo en las hipotecas.
Y de la misma forma que no ocultó las dificultades, mostró también su absoluta confianza en una salida de la crisis que “empezará a visualizarse en 2014, y llegará a ser patente en 2015”. Tampoco renegó de asegurar que lo peor de esa crisis “ya ha pasado”.

Otro año difícil. Para este ejercicio de 2013 persisten no obstante las dificultades, que Cajamar espera superar gracias a su estructura de equipo directivo y de una plantilla “comprometida y eficiente”. El consejero delegado, Manuel Yebra, considera que a pesar de las dificultades, y si no se producen nuevos contratiempos, la caja podría cerrar el año con unos beneficios que rondarían los 185 millones de euros.
El presidente considera que la situación compleja generada con el tema de las cláusulas suelo “había que afrontarla con medidas de choque para salvaguardar la solvencia de la caja”, y por ello se ha recurrido al cobro de comisiones y a un ajuste de los costes que tendrá que soportar el conjunto de la plantilla de la entidad. Reiteró, no obstante, que las comisiones serán retiradas en cuanto sea posible sin comprometer los balances de Cajamar.
Y a partir de ahí, una clara apuesta de futuro porque Juan de la Cruz Cárdenas considera que es necesario estar preparados para el nuevo escenario que saldrá de la crisis. Ahí “habrá que abrir la mente a nuevas ideas para garantizar la viabilidad”