“Todos los indicadores, salvo el empleo, apuntan a una mejora de la situación”

Preside el Colegio de Economistas de Almería y tiene una precisa visión de la situación por la que atraviesa la provincia. Trasmite esperanza ante la salida de la crisis pero advierte que queda camino por recorrer y apuestas que realizar.

Estamos ya a más de la mitad del año, ¿cómo ha evolucionado la situación económica en estos ocho meses en Almería? ¿Se ve algún síntoma de mejoría?
Hay que ser cautos a este respecto. Todos los indicadores, salvo el empleo, dan a entender que la situación ha mejorado. Sí que llama la atención que en el mes de agosto, a pesar de haber sido el mejor mes en turismo desde 1999, el paro haya subido, sin que se haya contrarrestado el paro estacional de la agricultura. Habrá que esperar a los resultados del último trimestre del año que es donde de verdad se va a ver si ha terminado la recesión, pues lo que es en crisis creo que todavía vamos a seguir por un tiempo.  

 En su opinión, ¿cuáles son los principales problemas que afrontan las empresas de Almería? ¿Sigue siendo la financiación el principal problema?
El problema actual de la financiación es consecuencia del alto grado de endeudamiento al que han llegado las empresas. Muchas de ellas están al límite. En general sí se podría decir que la financiación sigue siendo un problema, pero no necesariamente es el “principal” problema.
Por otro lado, muchas de las empresas almerienses se dedican a la actividad exportadora, y la lentitud en las devoluciones del IVA por parte de la Administración Tributaria también causa un perjuicio financiero y desfase de liquidez a este tipo de empresas.

El paro es uno de los principales problemas actualmente. En su opinión, ¿cuáles deberían de ser las medidas que tendrían que tomarse?
Las medidas que se tomen deben ir encaminadas a incentivar el consumo y que estimulen la economía de las pymes, que son las que pueden hacer que aumente el empleo en mayor medida. A este respecto, las subidas de impuestos a que nos hemos visto sometidos, no han incentivado el consumo sino todo lo contrario.

¿Cómo lo tienen los emprendedores almerienses? ¿Es difícil emprender ahora mismo?
Bueno, se acaba de aprobar la Ley de Emprendedores, así que parece un buen momento para emprender y aprovecharse de esas medidas. El poder aplicar el IVA de caja es una gran ventaja y algo que los autónomos llevábamos esperando mucho tiempo. Las reducciones en las cuotas de autónomos que emprendan durante 18 meses y que alcanzan hasta un 80% durante los 6 primeros meses es sin duda otra de las grandes medidas de esta ley, pero sobre todo porque no limita la edad del emprendedor, pues no podemos olvidarnos de que hay mucho desempleado mayor de 30 años. Otra medida que destacaría es la bonificación fiscal para inversores que financien proyectos empresariales, pues la mayoría de los nuevos proyectos necesitan de la ayuda de inversores para que sean viables.

¿La economía sumergida es un problema o una fórmula precaria de afrontar la crisis?
Es un gran problema por la no recaudación que conlleva debido al fraude fiscal y al fraude laboral. Las cifras así lo constatan. Se habla de que la economía sumergida ronda el 21% del PIB y que supone una menor recaudación de en torno a los 70.000 millones de euros.
En mi opinión, la economía sumergida es un problema de “conciencia social”, pues al final el que no contribuye por lo que debería en base a sus ingresos, está causando un perjuicio al resto de la sociedad, pues esa menor recaudación hace que las prestaciones sociales disminuyan. Usada en su justa medida, qué duda cabe que no causaría tanto perjuicio y ayuda a un equilibrio social. La tendencia debería ser tratar de bajar esa cifra a través de la lucha contra el fraude.

 En su discurso de toma de posesión dijo que Almería tiene recursos suficientes para salir de la crisis, especialmente en agricultura y piedra. ¿Cómo podrían las empresas tirar aún más del carro en la provincia?
Está claro que la economía almeriense se ha visto menos golpeada por la crisis gracias a este tipo de empresas. Son dos sectores totalmente distintos. Almería es la provincia andaluza con mayor volumen de exportaciones y el incremento de la actividad de estas empresas ha hecho que las exportaciones hayan aumentado más. No creo que se les pueda exigir más. Igualmente y cada una en su sector, han apostado por la innovación tecnológica para ser más rentables y competitivas.
Hablé también del turismo. Si bien es cierto que se está trabajando para mejorar el sector,  el tema de las comunicaciones sigue siendo nuestro mayor malogro y que está limitando nuestro desarrollo al nivel que esta provincia se merece. En muchos casos es difícil y costoso llegar a Almería y así es difícil competir. 

¿Qué le diría a los jóvenes que, bien formados, no pueden acceder al mercado laboral?
Lo primero, que no se desilusionen. Efectivamente tenemos jóvenes muy bien formados. Ya dije que si ahora no hay oportunidades para ellos aquí, que salgan fuera. Que no dejen de formarse ya que estamos en un mercado cada vez más competitivo y global. Los idiomas son fundamentales, así que es buen momento para aprenderlos.

Con la emigración de los jóvenes, ¿está perdiendo la provincia un capital humano irremplazable?                           No lo creo. Habrá de todo, pero lo que es indudable es que necesitamos que nuestros jóvenes tengan otra “visión” y que conozcan lo que hay fuera. No pienso que ese capital humano sea irremplazable; sólo con que vuelva una parte de ellos seguro que habrá merecido la pena. Hay muchos jóvenes que acaban sus estudios y desgraciadamente no hay trabajo para todos ellos en la provincia, por lo que la “emigración”, en muchos casos, parece la única salida.