La agricultura se llevó ayer la peor parte de la fuerte tromba de agua y granizo que cayó en parte de la comcarca del Poniente, especialmente, en El Ejido. Según las primeras estimaciones, unas 300 hectáreas de cultivo se vieron afectadas, a lo que hay que sumar daños en infraestructuras, explotaciones agrícolas y caminos rurales. La tormenta, que cayó al mediodía durante aproximadamente una hora, hizo que el servicio unificado de emergencias 112 recibiera una treintena de llamadas por las incidencias registradas en el municipio.
Representantes de las organizaciones agrarias, el Ayuntamiento, la Junta de Andalucía y la Subdelegación del Gobierno visitaron ayer las principales zonas afectadas -Santa María del Aguila, Las Norias y el Polígono La Redonda- para comprobar ‘in situ’ los daños ocasionados. La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Almería (UPA) cuantificó ayer tarde los daños en unos 32 millones de euros, de los que 30 corresponderian a pérdidas en los cultivos. Además de El Ejido, UPA indicó que el temporal también afectó a los municipios de Dalías, La Mojonera y Adra.
Instalaciones
Esta organización agraria también destacó que se vieron afectados el 60% de las vías de comunicación de las explotaciones y en torno a 60 kilómetros de caminos rurales. También señaló que se perdió el 10% de las instalaciones de riego, tuberías principales y secundarias, así como otras infraestructuras en las parcelas.
Por su parte, Asaja-Almería afirmó que, aunque aún es pronto para cuantificar los daños, se puede hablar de que 4 de cada 10 invernaderos ubicados en la zona que fue visitada por la organización cedieron y acabaron en el suelo. Asaja destacó el temor de los agricultores a que durante esta noche las estructuras cedan debido al peso del granizo que aún permanecía ayer por la tarde.
Asaja también mostró la preocupación de los agricultores colindantes a la Balsa del Sapo, que subió unos 30 centímetros, “cifra que podría incrementarse en los próximos días, con el deshielo”. Una situación que confirmó a LA VOZ el portavoz de la Asociación Las Norias de Daza, Juan Bartolomé Escobar, quien indicó que la mayoría de las ramblas que desembocan en la Balsa del Sapo proceden de la zona norte del municipio, la más castigada ayer por el temporal.
Viejos y nuevos
Andrés Góngora, secretario general de COAG, apuntó que “hay muchos, muchos invernaderos en el suelo”. “No solo se tratan de estructuras viejas, sino que otras nuevas tampoco pudieron soportar el granizo acumulado”, apuntó.
En algunas ramblas, como La Cueva de la Sal, la Rambla del Águila y La Maleza, el agua recorrió ayer su cauce.
Diputación informó que pone a disposición del Ayuntamiento maquinaria. Ésta, entre las que destaca una montoniveladora, empezará hoy a primera hora a abrir caminos anegados.
Oficinas y trámites
Hoy toca cuantificar de forma más exacta las pérdidas y empezar a hablar de futuras ayudas. El Ayuntamiento de El Ejido habilitará una oficina técnica para la declaración de daños y solicitará que se habilite una línea de créditos blandos para ayudar a los agricultores. Una medida, esta última, que ya anunció ayer la entidad bancaria de Cajamar.
COAG indicó que a partir de hoy pondrá todos los servicios técnicos de la organización para evaluar los daños. “Que cada agricultor afectado, en mayor o menor medida, documente con claridad lo que le ha ocurrido mediante un certificado de daños. Un trámite que realizaremos de forma gratuita a todos y no solo a nuestros socios”, afirmó Andrés Góngora, secretario general. “Tan solo algunos agricultores tenían seguro debido a las dificultades impuestas en esta campaña”, comentó ayer.
Los servicios técnicos de Asaja han comenzado a trabajar en la elaboración de informes de daños y en la tramitación de los partes de siniestro a aquellas explotaciones que están aseguradas. UPA pidió reuniones urgentes para coordinar acciones. La delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía, Sonia Ferrer, señaló que se ha puesto a disposición de El Ejido los medios materiales y personales.
Otros daños
Además de causar daños en la agricultura, calles, plazas y algunas viviendas del municipio de El Ejido se inundaron de agua. La tormenta, que no dejó daños personales, provocó también que varios conductores quedaran atrapados en sus vehículos, de forma que necesitaron la asistencia urgente de los Bomberos del Poniente para poder salir de los coches.
El servicio unificado de emergencias 112 recibió una treintena de llamadas por las incidencias.
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