El fuego acapara este San Ildefonso

En las fiestas en honor a San Ildefonso el fuego deja de ser protagonista entrada la madrugada, cuando los aficionados a las carretillas abandonan las calles de Olula del Río buscando descanso para la siguiente jornada.

Esta rutina se rompió ayer cuando el olor a quemado y el humo seguían presentes en algunas calles céntricas del pueblo a primera hora de la mañana. El motivo, un incendio originado en la segunda planta del ayuntamiento cuando el reloj marcaba aproximadamente las ocho de la mañana.

Expansión del fuego

Las llamas han devorado gran parte de la planta en la que estaban situadas las dependencias de la radio municipal y cuyos equipos, repartidos en cuatro habitaciones, han quedado reducidos a cenizas.
El resto del edificio también ha sufrido las consecuencias de este incendio que cuando fue descubierto por una trabajadora de la limpieza que se percató del fuerte olor, era tan sólo un pequeño foco. Tras su detección el fuego ya era imposible de controlar para los trabajadores que empezaban en ese momento su jornada laboral en el consistorio, entre los que se encontraba el alcalde.

Ante la expansión del fuego, los empleados tomaron la decisión de llamar a los servicios de emergencias. Gracias a la actuación de Protección Civil, Guardia Civil y los Bomberos de Albox el fuego quedó controlado al poco tiempo. Si bien las llamas no han alcanzado el resto del edificio, el humo ha dejado marcas en parte del mismo que, se espera, pueda “volver a la normalidad cuanto antes”, según ha explicado el propio regidor, Antonio Martínez Pascual.

Desperfectos

“Vamos a tener bastante desperfectos dentro del edificio. La planta baja de oficinas está totalmente inundada debido al agua que se ha necesitado para el incendio”, ha detallado Martínez Pascual.

La rapidez con la que las llamas se han extendido por las dependencias de la segunda planta podría deberse a la existencia de “equipos de la radio que funcionan las veinticuatro horas y que tienen cierta temperatura, además de paredes de insonorización de corcho”, ha añadido el regidor de Olula del Río.

Festividad

Pasado el susto, la fiesta ha proseguido como estaba previsto, aunque con la excepción del tradicional lanzamiento de roscos que normalmente se realiza desde uno de los balcones del ayuntamiento y que este año se ha hecho desde una casa.

“Nos hemos llevado una mala sorpresa este San Ildefonso”, ha lamentado el alcalde. Unas fiestas que este año no sólo han quedado marcadas por  las carretillas, sino por la inédita imagen de las lenguas de fuego buscando una salida por el balcón del ayuntamiento. Una instantánea que ha corrido como la pólvora entre los teléfonos de vecinos de toda la comarca.