El diputado provincial de Izquierda Unida Juan Pablo Yakubiuk ha anunciado la presentación de una propuesta al Pleno de la Diputación para la creación de un Banco Público de Tierras destinadas a ser cultivadas.
Todas la tierras que integrarían ese banco son de titularidad pública y, en concreto, forman parte del patrimonio de la propia Diputación Provincial. Los datos para elaborar la propuesta proceden, de hecho, del inventario de bienes inmuebles de la Institución.
Se trata en casi todos los casos de propiedades del tipo finca rústica, y algunas otras de parcelas urbanas que no tienen utilidad actualmente, o que pueden ser destinadas a los cultivos al tratarse de actividades no lucrativas.
La idea, explicaba ayer Yakubiuk, es que el patrimonio de la Diputación, unas propiedades que son públicas, puedan ser utilizadas para dar cobijo a actividades productivas impulsadas tanto por la propia Diputación como por asociaciones, cooperativas, organizaciones no gubernamentales o empresas de la economía social para poner en marcha proyectos de explotación razonables y que sean viables.
El diputado sostiene que la propuesta al Pleno recoge la necesidad de que antes de abordar la creación del Banco de Tierras y poner en marcha este tipo de actuaciones, tanto los servicios jurídicos como los departamentos técnicos de la propia Diputación elaboren informes para determinar sus posibles usos y la viabilidad técnica, jurídica y económica de darles un destino más productivo.
Se trataría de favorecer el desarrollo de nuevas actividades económicas y de permitir que personas o colectivos que no tienen capacidad para la compra de tierras puedan poner en marcha proyectos de producción agraria y generar con ello en las zonas en las que se ubican las fincas actividad económica y empleo.
Juan Pablo Yukubiuk señala que sobre esos suelos se pueden desarrollar proyectos para la producción de hortalizas, pero también otros con productos diferentes, de buena rentabilidad y perspectivas de futuro, como las flores, plantas ornamentales, plantas aromáticas e incluso cultivos exóticos como podría ser la estevia.
Las tierras inventariadas por la Diputación que son susceptibles de integrar ese banco suman en torno a los 600.000 metros cuadrados repartidos por ocho municipios de la provincia. La mayor bolsa se encuentra en Fines, con 418.363 metros cuadrados, aunque alberga en parte un vertedero de residuos del sector del mármol.
El paraje almeriense de La Molineta cuenta con otros 79.445 metros cuadrados que pueden ser cultivados sin romper la integridad del conjunto ambiental. El resto se reparten por la provincia.
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