Arden tres barcos en Las Negras en lo que parece un fuego intencionado

Dos de las embarcaciones pertenecían a la misma persona y la otra a la escuela de buceo

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Eva de la Torre
21:13 • 25 abr. 2014

En la madrugada del pasado jueves, tres embarcaciones que se encontraban en la playa de Las Negras, en el municipio de Níjar, fueron pasto del fuego. Dos de ellas pertenecían a la misma persona y la tercera a la escuela de buceo que hay en esta localidad nijareña.

Aunque aún no se puede confirmar, todo apunta a que el fuego ha sido provocado intencionadamente y que el autor o los autores iban contra el propietario de dos zódiac. De las tres naves, una estaba sobre la arena y dos, se encontraban fondeadas en el agua.

En la mañana de ayer viernes, los afectados interpusieron la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil, que ha confirmado la presunta intencionalidad de los hechos.




Humeando 

Según ha relatado un vecino, cuando sobre las siete de la mañana, como cada día, paseaba por la playa con sus perros, se encontró con las embarcaciones quemadas e, incluso, una de ellas aún humeaba.

Por el estado en que se encontraban, parece que vertieron algún líquido inflamable en la zódiac que había en la arena, la cual ha quedado totalmente calcinada. También arrojaron algo a la que se encontraba en el mar y, al arder se prendió el depósito de gasolina lo que provocó que saliera despedida quedando vuelta boca abajo.

Fue entonces cuando la gasolina ardiendo que se había vertido sobre la superficie del mar alcanzó a la otra embarcación, la de la escuela de buceo, prendiéndole fuego.

Se desconocen los motivos que han podido llevar a quemar las embarcaciones y, además, el propietario, según vecinos de Las Negras, “no es conflictivo en absoluto, sino más bien lo contrario”.




Ruidos molestos

El pequeño enclave de Las Negras, en que habitualmente viven unos 300 vecinos, se ha visto en los dos últimos años algo desbordado por un turismo diferente al que solía frecuentar este rincón del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar.

La cuestión es que tanto en verano como en los distintos periodos vacacionales, como la pasada Semana Santa, la actividad hostelera llega a alterar la vida de los vecinos.

Este es el caso de Isabel Granados, una mujer que, por segundo año consecutivo, ha hecho llegar al alcalde sus quejas por el ruido que producen locales próximos a su vivienda.

El principal problema “son los conciertos que los bares organizan en la calle y que alcanzan hasta la madrugada”, se lamenta Granados, que asegura que, cuando llega el verano, “me paso días y días sin poder descansar”.




Actuaciones

No debe de andar Isabel  muy descaminada, ya que el alcalde, Antonio Jesús Rodríguez, reconocía que hay locales que montan actuaciones en las terrazas.

Rodríguez aseguró que tras el puente de mayo del pasado año, se habían abierto seis expedientes a locales de ocio.
El alcalde siempre ha defendido que hay que intentar que la actividad de los empresarios del sector de la hostelería sea compatible con el legítimo derecho al descanso de los vecinos y visitantes. De hecho, ya entonces aseguró que se iban a poner en marcha más controles, algo que según Isabel, no ha ocurrido.








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