Gestagua llevará el agua corriente al campo en el plazo de dos meses

El campo de Albox tendrá  agua corriente en el plazo de alrededor de dos meses, según lo declarado a este periódico por el Alcalde de Albox, Rogelia Mena y el jefe de Explotación de Gestagua, Eduardo Cano, empresa que gestiona el ciclo completo de suministro y saneamiento. “Llevábamos toda la vida luchando por ello”, afirma el primer edil albojense. 

Esto será un acontecimiento histórico para decenas de pedanías de este municipio como Llano del Espino, Ventarique o Fuente del Mojón, que jamás han tenido abastecimiento de agua potable de una red pública. Durante toda su existencia, los vecinos de estos pequeños nuecleos del campo albojense han cogido el agua de pozos  o aljibes, comunitarios, naturales o privados.  

Potabilizadora y red
La recta final la dio hace pocos días la presidenta de la Junta, Susana Díaz, quien junto al alcalde de Albox, inauguraba la planta potabilizadora del municipio. Antes de potabilizar el líquido elemento, Rogelio Mena señala los acuerdos logrados para poder traerlo: “La autorización de Acuamed para la conexión en la tubería del pantano; el convenio con Aguas del Almanzora y la adenda con Gestagua para la construcción de la potabilizadora”. La piedra angular del abastecimiento de agua potable en Albox es la conexión al Negratín, lograda por Mena y que supone un cambio de enfoque respecto a anteriores intentos frustrados. “Es la que y nos permite tener un caudal suficiente para abastecer el campo tras años y años de obras que no tuvieron  solución”, asegura el jefe de Gestagua. 

El último paso se firmó en contrato hace días y es el que supone la revisión y puesta a punto por Gestagua de lo ya construido y la terminación de la red de suministro hasta las zonas más altas del campo albojense.  “Estamos corriendo porque el Alcalde quiere que la gente del campo tenga ya el agua”, afirma.  “Todos son ciudadanos de Albox”, añade Mena. 

Fases e intentos
Con esta referencia se refiere a las obras anteriores, que aunque no acabaron con el ansiado suministro ahora sirven y se ponen en valor. Así, en el año 2009 se hizo la “red en alta” por la que se instalaron 15 kilómetros de tubería y construyeron dos depósitos. Aquel proyecto no se llegó a concretar.  

Hubo una segunda fase “en baja” en el año 2012 por la que se metieron las tuberísa por el casco urbano con la intención de bajar el agua desde Oria hacia abajo. Aquello tampoco pudo ser. Es ahora, con una tercera inversión en infraestructuras y un cambio de planteamiento cuando se completará el trabajo. Ya no se bajará el agua desde Oria sino que se suministrará  “de abajo para arriba”, con el esfuerzo que conlleva esto. 

“Hay una serie de abonados que por desgracia no vamos a poder por ahora abastecer -matiza Cano-. Solo llegamos hasta Las Pocicas y Los Faraones. Al Saliente alto no llegamos por desgracia por la diferencia de cota, no podemos bombear ni hay más depósitos, son limitaciones técnicas”, afirma  el responsable de Gestagua.   “A lo mejor algún vecino de Las Pocicas y El Saliente alto se ve afectado porque estaba en principio abastecer al contrario, desde el punto más alto al más bajo. Ahora lo vamos a hacer al revés, bombeando desde abajo hacia arriba mediante tres rebombeos”, concreta. 

Este proceso se inicia en la Planta de Tratamiento de Agua Potable que inauguró recientemente la Presidenta de la Junta de Andalucía.

El segundo rebombeo se hará en el depósito de El Llano de los Olleres, que se construyó en 2009. Y desde aqui, el agua llegará al depósito más alto, en Las Pocicas. En total, son los últimos cuatro kilómetros de tuberías los que quedan, las bombas y los depósitos.   “Ese es otro reto porque en 2012 hicimos 38 kilómetros de red que no se  han usado”, dice Cano.

Futuro coste
Esta complicación técnica puede que encarezca el coste de la factura porque así lo obligan las leyes de la UE, admite el jefe de Gestagua.  “Se va a llevar agua en contra de la naturaleza y de la economía , porque es cuestión de kilowatios y por tanto de dinero”, afirma Cano.  En cuanto llegue el agua corriente al campo, habrá un otoño de mucho trabajo para que los vecinos de estas pedanías contraten las acometidas y así este hito histórico para Albox comenzará a ser realidad.