El hotel gay de Alcora, en el aire por la subvención

Si el lunes se conocía que el Grupo de Desarrollo Rural (GDR) de la Alpujarra-Sierra Nevada había aprobado una subvención de 200.000 euros para el futuro hotel destinado fundamentalmente a público gay que se va a construir en la barriada de Alcora, en Canjáyar, ayer se supo que su futuro puede estar en el aire.

La razón no es otra que el límite en el tiempo que impone la subvención y que obligaría a que  el proyecto estuviera acabado y en marcha para finales de febrero del próximo año, ya que en caso contrario tendría que devolver la subvención.

Según ha explicado a la Cadena SER el alcalde de Canjáyar, Francisco Alonso, es lógico que para acogerse a una subvención de un organismo oficial haya que cumplir una serie de condiciones, pero en este caso, “será prácticamente imposible que dé tiempo a llevar a término cada uno de los requisitos, fundamentalmente, el tema de las licencias que se han de conseguir”.

Tal es así, que, según ha señalado Alonso, el empresario promotor del hotel, Antonio Fornieles, está a punto de renunciar a la subvención e ir haciendo el hotel poco a poco, aunque tarde más tiempo en terminarlo y ponerlo en marcha.

Sin tiempo
El problema radica en que la subvención concedida llega demasiado tarde. Normalmente el plazo de ejecución de proyectos de este tipo se alarga en torno a los 18 meses.

Sin embargo, en este caso se trata de una ayuda que ya fue concedida a otro proyecto, a la que el promotor finalmente hubo de renunciar. Pero ese plazo ya abierto ha seguido corriendo, de forma que al proyecto del hotel gay de Canjáyar sólo le queda poco más de seis meses, un tiempo muy escaso para concluir las obras y abrir las puertas del establecimiento.

Una de las dificultades radica, precisamente, en el tiempo de tramitación que precisa la concesión de las licencias definitivas, que sólo pueden pedirse una vez terminado el proyecto, y que se dilatan por espacio de varios meses.

El hotel de Alcora será el primero de la provincia destinado al público gay y pretende convertirse en un punto de rferencia para este colectivo, ofreciendo equipamiento de lujo en un entorno de naturaleza, sobre el río Andarax y frente a Sierra Nevada.