Vecinos de la Rambla de Oria piden una carretera más segura hasta Albox

“Cada vez que un familiar tiene que coger el coche le pido que me llame al llegar”. La preocupación de esta vecina de la Rambla de Oria que prefiere no hacer público su nombre es una buena muestra del sentir de otros paisanos suyos orialeños acerca de la vía que usan para desplazarse desde su barriada.
La carretera provincial que une el núcleo urbano del municipio de Albox y varias de sus pedanías con la barriada de la Rambla de Oria se encuentra asfaltada, además de forma reciente en muchos de sus tramos. A pesar de esto, a lo largo de sus más de diez kilómetros no existe prácticamente señalización alguna que advierta a los usuarios de esta vía la proximidad de curvas peligrosas que sin embargo, como las meigas haberlas, ‘haylas’, y no son pocas. Basta con recorrer este trayecto una vez para cerciorarse de que lo recomendable es no alejar el pie del pedal de freno incluso cuando no hay giros bruscos próximos.
Tampoco es menos cierta la inexistencia de guardarraíles o ‘quitamiedos’, que vecinos de esta barriada de Oria creen necesarios debido a la pronunciación de los terraplenes que bordean el asfalto en varios tramos de esta carretera.

Paso por rambla “Está llena de precipicios de muchos metros y no hay quitamiedos. Además en algunas partes es mejor que no se crucen dos vehículos por lo estrecha que es”, denuncia otro vecino, residente en la Rambla de Oria.
El paso obligado por ramblas es otro factor más que en ocasiones dificulta la conexión entre los diferentes núcleos urbanos que dependen de esta vía “porque no hay puentes”, lamenta el mismo vecino. “El estado de la carretera es pésimo. Cuando llueven cuatro gotas hay que atravesar la rambla y no tiene puente, es algo tercermundista”, añade. La misma carretera es utilizada “por el transporte escolar, el transporte de personas con discapacidad... Y no digamos ya en el caso de que una ambulancia necesite pasar por aquí”, advierte.
Coincidiendo con la celebración del carnaval, un grupo de jóvenes disfrazadas pasea por la barriada orialeña. Coinciden al ser preguntadas por la carretera que les lleva desde sus hogares hasta Albox. “No está muy bien porque a veces es muy estrecha”, responde una de las vecinas que es interrumpida por otra acompañante. “Sobre todo por las noches es un peligro”, añade la acompañante pidiendo también su arreglo.