La Virgen del Pilar de La Cinta luce su restauración

Un gran número de devotos acompañaron a la Patrona de la barriada en su 75 aniversario

imagen de la Virgen anterior a la restauración (izquierda) y tras el trabajo (derecha).
imagen de la Virgen anterior a la restauración (izquierda) y tras el trabajo (derecha).
Guillermo Mirón
21:15 • 03 mar. 2015

La nueva Virgen del Pilar de Arboleas lució como nunca en la histórica procesión del pasado sábado. Histórica por el hecho de la procesión en sí, ya que nunca se había llevado al núcleo urbano arboleano esta imagen que habitualmente descansa en la barriada de La Cinta.





Pero lo más esperado por parte de lo devotos que durante el fin de semana acompañaron a la Virgen fue ver su nuevo aspecto tras el proceso de restauración al que ha sido sometida en los últimos meses.

Trabajo realizado




El restaurador Joaquín Gilabert López ha sido el encargado de que la Virgen del Pilar luzca como nueva. Las mismas manos por las que recientemente pasó la Virgen del Saliente, también conocida como La Pequeñica. Nunca la Virgen del Pilar de La Cinta había salido de su ermita en la barriada. Tras su restauración y por primera vez la imagen fue llevada a la parroquia de Arboleas el día 7 de febrero y ha descansado en el núcleo urbano del municipio hasta el pasado 28 de febrero.





Durante el pasado mes han sido numerosos los fieles que han aprovechado la ocasión para visitarla y contemplar la obra de restauración llevada a cabo por Gilabert López. El trabajo del restaurador, que ha durado aproximadamente un mes y medio, ha consistido principalmente en eliminar barnices oxidados y algunas intervenciones que la imagen ha sufrido a lo largo de sus 75 años. “La imagen estaba totalmente repintada con barnices y la policromía original estaba completamente enmascarada por sucesivas capas de barnices muy alterados”, explica Joaquín Gilabert, quien sin embargo concluye afirmando que no se ha encontrado con “ninguna dificultad adicional” para restaurar la obra.

Celebraciones




El desplazamiento hasta la barriada de La Cinta acompañando a la Virgen del Pilar  fue seguido por un gran número de fieles. Con motivo de la celebración se realizó una misa, además de una comida y baile amenizado por una orquesta.





De igual modo, una muestra de cómo el pueblo se ha volcado con el paso de la Virgen del Pilar por la parroquia tras la restauración ha sido su nombramiento como hermana mayor o camarera honorífica de cada una de las cofradías. En la misma jornada de celebración se descubrió una placa en conmemoración del 75 aniversario de la Patrona de La Cinta y en la que se menciona el trabajo del restaurador así como al párroco Francisco Jerónimo Ruiz Gea.




La intención es que esta no sea la última peregrinación hasta dentro de 75 años sino que el propósito de los devotos es que la procesión se pueda repetir en próximos años . Desde este sábado quienes aún no hayan visto la nueva cara de la Virgen del Pilar pueden hacerlo en la ermita de La Cinta, donde ha pasado los últimos tres cuartos de siglo.





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