J. A. Varona, de los despachos de Diputación a los senderos de la provincia

El presidente de la Diputación, Gabriel Amat,  cerró el pleno ayer agradeciendo al secretario adjunto Juan Antonio Varona, sus 35 años de trabajo en Diputación. La Corporación en pleno se puso de pie y le brindó un afectuoso aplauso ante su inminente jubilación en junio.
Juan Antonio Varona lleva trabajando en Diputación desde 1980. Natural de Cuevas del Almanzora, tras acabar su licenciatura por Derecho en Granada comenzó a trabajar primero en la Diputación de Málaga, donde vivió un emotivo episodio de la Transición.   Tras ganar otras  oposiciones,  en 1980 comenzó a trabajar en la Diputación de Almería, donde fue  jefe de personal primero y posteriormente secretario adjunto al titular Mariano Espín. 

Memoria Varona ha conocido diferentes políticos, etapas y estilos de gestión. “Sus perfiles han sido muy diferentes y se han ido complemententando”. De la mayoría destaca algún aspecto positivo.  De Maresca, recuerda su “mayor preocupación por la cultura”...de Azorín recuerda su énfasis en las infraestructuras; con Luis Rogelio, “Diputación se hizo más visible y se acercó a los municipios. Con él se produjo un salto”,  al ofrecer servicios nuevos que consideraba que la Junta no prestaba a los municipios. La de Añez fue una etapa convulsa y la de Usero fue una ocasión perdida. De Amat, “puedo decir que su trato personal es cordial, sabe lo que quiere y tiene un conocimiento exhaustivo de lo que se hace en la casa”, matizó.
Varona trabajó en cooperación internacional en Guatemala y viajó mucho por America Latina de la mano de la UIM, junto a Fernando Juan Fernández. 
A Juan Antonio Varona le espera ahora un mapa de Almería, donde tiene señalados en rojo los cientos de kilómetros que ya ha andando con sus compañeros de Alsendero y los del Club Montenegro. “Tengo un grupo de amigos que nos llamamos Alsendero y con el que llevo diez años andando. Ya hemos hecho 290 rutas”, afirma.