Los bañistas de Vera vuelven a la playa sin miedo a las microalgas

Los bañistas han salido de sus urbanizaciones en Vera para disfrutar de la playa después de una semana “en seco”. Las restricciones por la microalga no supuso el cierre de las playas, pero sí la prohibición de baño. El litoral era transitable pero los usuarios no podían acercarse a 50 metros del rompeolas, algo que ha afectado principalmente a las reservas, según explican algunos comerciantes de la zona. “Los que tienen apartamentos se quedan en sus piscinas y comen en sus casas, pero los que vienen a los grandes hoteles, llaman para cancelar”, señala el dueño del chiringuito Mar y Arena.

Sin contar con datos concretos, en la última semana la afluencia de turistas se ha reducido a la mitad, mientras que en menor medida se han visto afectadas las urbanizaciones de apartahoteles. No obstante, los establecimientos de la zona están esperanzados en que las medidas promocionales anunciadas y la llegada del mes de julio revierta la situación con la llegada de una nueva tanda de veraneantes.

Además, piden a la clientela habitual que no cambie de destino puesto que “en Vera vivimos prácticamente del verano”. Así, la dueña del Kiosco El Marqués resalta que “mis hijos se han bañado todos estos días en la playa y no les ha pasado nada”. De hecho, una de sus preocupaciones es que se desconoce que de los seis kilómetros de playa de Vera, sólo han estado afectadas la zona de Cala Marqués y parte de la playa naturista.

Socorristas
Pocas han sido las personas que no han respetado la restricción, explica Rudy Mahiques, coordinador de los socorristas Vera, “sólo algún que otro extranjero por dificultades con el idioma, pero suelen ser muy educados y pronto salían del agua”.

Los socorristas de la empresa Sama 2005 han estado junto a la Policía Local otorgando información para evitar nuevas intoxicaciones y, junto a los agentes municipales, fueron los encargados de retirar banderas rojas y los bandos a partir de las 6 de la tarde del pasado día 29 en que se levantaba la prohibición.

Cuevas
La playa está muy sucia todavía en la zona que aún no está abierta, con muchas algas, explica Pedro Collado un bañista que prefirió dirigirse hasta las colindantes urbanizaciones de Vera. Con todo, destaca que en ningún momento ha dejado de bañarse y no se ha visto afectado.

Por el momento no hay fecha para que se levante la prohibición en la zona de Palomares y se están planteando campañas promocionales conjuntas entre los ayuntamientos afectados para reactivar el turismo, que se sumará a la ya anunciada por la Diputación de Almería.