Los turreros pagarán hasta 2024 su cuenta pendiente por el agua de casa

El Ayuntamiento de Turre ya ha dado luz verde en este mes de febrero al primer pago de 6.000 euros con el que se pretende sufragar la deuda contraida en los últimos años con Galasa. En total son 647.475 euros la cuenta pendiente con la entidad desde que Turre dejara de autoabastecerse con pozos propios y tuviera que adherirse a la red general, aunque reservando para el Ayuntamiento la gestión del ciclo del agua, una decisión que se tomó hace 22 años y que es la que ha llevado hoy día a la deuda millonaria.
El pasado jueves, el equipo de Gobierno de Turre cerraba siete meses de negociaciones con la aprobación del convenio que devuelve a Galasa la gestión integral del agua y deja en manos de la empresa la gestión directa con el usuario . 

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La tarifación se reduce en cerca de 25 céntimos el metro cúbico, la empresa se garantiza el cobro y el Ayuntamiento deja de estar inmerso en esa “liquidez ficticia” de la que se habló en Pleno y que es la que ha llevado a cobrar a los turreros el agua, pero no pagarla a Galasa, considerando que su precio era demasiado caro en comparación con los municipios colindantes en los que la gestión integral no era de los ayuntamientos, sino directamente de la empresa. 
“Cuanto más alarguemos esta situación más se incrementará la deuda y son unos 30.000 euros al mes”, explicaba el alcalde de Somos Turre, Martín Morales, quien ha apostado por esta vía, aunque sin cerrar posibles negociaciones de futuro con otras entidades y que en la actualidad resultan difíciles por la necesidad de realizar inversiones propias. Además, queda por cerrar aún el pago de la también cuantiosa deuda acumulada en 2015, más de 400.000 euros que siguen pendientes y de los que se espera una rebaja por el exceso tarifario respecto a otros pueblos.

Deslealtad

Según el alcalde “estamos siendo desleales con los demás municipios del Levante integrantes en Galasa con el impago y acumulamos una deuda que en un juzgado estaríamos obligados a pagar en una sola cuota”, lo que le lleva, de forma muy criticada por la oposición,a respaldar un convenio que fue pilar del programa de su socio de Gobierno, el PSOE. Así, el portavoz de esta formación en el equipo de Gobierno en Turre, Ginés Artero, insistió en pedir el voto a favor el PP, con la voluntad de “mirar hacia adelante y subirse al tren del futuro”.

Calidad

Mucho ha cambiado la calidad del servicio en los últimos años. El PP incide en las muchas críticas que recibieron durante su mandato por la mala calidad del agua y las constantes fugas. En este sentido, explicó el ex alcalde, Arturo Grima que su voto en contra se debía a que el convenio “está bien en algunos puntos, pero no en su conjunto”. Además, pidió participación en las negociaciones de ámbitos tan importantes como los problemas hídricos del municipio y que se mantenga la política de reurbanización de las calles más afectadas por fugas, un problema que desde hace décadas afecta a las calles del casco viejo.

El alcalde reconoció que en el municipio el 65 % del agua se fugaba de las tuberías, a la espera de la llegada de nuevas partidas supramunicipales que puedan sufragar los costes de las mejoras en las redes de servicios.
Por otra parte, desde la oposición se advirtió al alcalde la existencia de vecinos que impagan y que ahora, con la gestión directa de Galasa pueden ver cortado el suministro y hacer responsable a la gestión del alcalde. En este sentido, Morales incidió que habrá apoyo a las familias que por situación de dificultad económica no pueda hacer frente a las facturas.