Andalucía, la tierra donde la variedad convive con las similitudes

Ser la segunda comunidad autónoma más grande de España y poseer unas dimensiones similares a las de Portugal convierten a Andalucía en una mezcla de paisajes, acentos y ritmos que se extiende a lo ancho de todo el sur del país. Así, donde unos pocos ven diferencias, otros muchos ven variedad. Donde unos pocos ven distancias, otros muchos ven conexiones. Porque hay muchas Andalucías dentro de la propia Andalucía. Y, aunque no todas cumplen los clichés y los estereotipos, todas poseen nexos con esta tierra bañada por el dorado del sol, el verde de las grandes extensiones de campo y el intenso azul del mar.

En Almería, como en el resto de las ocho provincias andaluzas, se celebra este 28 de febrero con devoción y tradiciones típicas. En todos y cada uno de los municipios de la provincia se conmemora este día, y ni siquiera las restricciones por el coronavirus han impedido que el sentimiento andaluz brote. Tostadas de tomate y aceite, grandes pailas de migas, música característica o izados de banderas verdiblancas acompañan este día festivo.

Reconocimientos

Pero, desde hace algunas décadas, este Día de Andalucía va acompañado de reconocimientos a aquellos andaluces destacados. Son muchos los almerienses que han obtenido estas Medallas de Andalucía desde que se instauraron allá por el año 1985.

De hecho, solo en lo que llevamos de siglo se ha homenajeado a Carlos Herrera (2001), a la Asociación Provincial de Empresarios del Mármol de Almería (2002), a Miguel Lorente (2002), a Ginés Morata (2003), a Carlos Pérez Siquier (2003), a Juan José Salvador Giménez (2004), a la CASI (2005), a David Bisbal (2006), a María García Torrecillas (2007),  a Manolo Escobar (2008), a la Asociación A Toda Vela (2009), a Fernando Hiraldo Cano (2009), a Francisca Díaz Torres (2010), a Juan Ballesta (2011), a Antonio Pérez Lao (2012), a Lola Gómez Ferrón (2013), a Única Group (2014), a Flor de Torres (2014), a Vicasol (2015),  a Josefina Samper (2016), a Ramón González (2017), a Rosa María García-Malea (2018), a Francisco Martínez-Cosentino (2019), a Biosabor SAT (2019), a Verdita Comercializadora Agrícola (2020), a La Legión (2020) y a la Congregación de las Hermanas Oblatas (2021).

Almerienses, todos ellos, que han encarnado grandes valores y que han llevado el nombre de su provincia y de su comunidad autónoma allá por donde han ido. Almerienses, andaluces y españoles que han demostrado tener mucho que decir.

Porque el indalo, las migas, las palabras "chacho" o "socio", Cabo de Gata o el desierto son tan andaluces como el flamenco. Se trata, simplemente, de perspectivas. Y, en Andalucía, sobran.