El día que Cabrejas ganaba la guerra

Un 10 de enero del año 2001 acabó la guerra del fútbol almeriense para siempre. Sin vencedores ni vencidos como pretendía Juan Rojas, pero con un equipo fuerte en competición y el otro a un cajón de la Federación.

Aquella fue una unión política y sentimental, pero en la Federación aparecían los titulares de la obra ya con todo hablado y firmado. Menudo rebote se llevo el presidente de la FAF, Nicolás Uclés, con sus amigos de Poli y Almería Ceefe.

Misión cumplida

Santiago Martínez Cabrejas tomaba la palabra en el viejo salón de plenos y le dedicaba sus primeras palabras al “artífice de la Unión de los dos Almerías, Juan Rojas, que nos dejaba el pasado verano y estará orgulloso de su obra”, luego dirigía la palabra a los representantes de ambos clubes que se mostraban ilusionados con el nuevo proyecto creado “de igual a igual” como dejaba atado Juan Rojas en vida, pese a que el número federativo con el que hoy compite el Almería pertenece al Ceefe y el Polideportivo sigue vivo y en Tercera con su número heredado del Campohermoso.

Unidos

El alcalde Cabrejas ponía punto y final al eterno dilema de las horas de uso del campo Municipal y al enorme gasto en reparación del césped tan castigado por dos equipos profesionales. Se notaba en el ambiente que se había logrado ganar para siempre una guerra y que a partir de aquel invierno de 2001 comenzaba “otro ciclo para Almería porque en esta tierra somos muy dados a los ciclos”, decía siempre el mítico Juan Rojas.

No se podía imaginar Santiago Martínez Cabrejas que su Almería recién ‘fundado’ pasaría 6 temporadas en Primera División y que tendría un Estadio acorde con la categoría de su ciudad. Se hizo tanto que aquel día de 2001 nadie podía imaginar lo vivido porque aún esta ciudad miraba a su pasado reciente con más de una década de guerras.

Fundadores

Hubo muchos momentos y muchas fotos, no tantas como en nuestros tiempos, pero una destacaba por encima de todas y reflejaba el momento y los nuevos tiempos para Almería.

Ver a Pepe Meca (fundador del Poli Almería en 1983) y a Guillermo Blanes (creador del Almería Ceefe en 1989) sosteniendo una camiseta rojiblanca, fue la imagen del armisticio futbolístico.

La obra maestra

Juan Rojas no pudo salir en la foto de su gran obra. De su último servicio al Almería. De su ilusión de aficionado. De lo que para él era una obligación y quizás por lo que entró en el mundo de la política donde aprendió pronto y no tuvo tiempo de realizar todos sus proyectos.

El recuerdo emocionado en aquel frío enero de 2001 de Santiago Martínez Cabrejas hacia la figura de Juan Rojas fallecido el verano anterior lo dejaba claro: “mi concejal de Deportes fue el artífice de la unión de los dos Almerías.

En las actas de aquellas reuniones de hacía más de un año, aparecían nombres emblemáticos como Manolo García, Pepe Guijarro, José Meca  o Guillermo Blanes.

Todos querían lo mejor para Almería pero sin saber como y el por qué, llevaban más de una década de divisiones y el primer mensaje de Rojas fue claro y directo a los presentes en su despacho municipal: “quiero una unión de igual a igual en Almería”.

Pero Juan Rojas era consciente de la delicada situación del Polideportivo Almería y de la buena salud del Ceefe que ya era una SAD constituida y en lo económico no presentaba problemas. Rojas pidió a unos y a otros que cedieran e hicieran sacrificios porque: “tenemos que sacar adelante un único Almería para desterrar esta mediocridad en la que nos vemos inmersos”.

Juan Rojas no era un político al uso pero conocía el fútbol como nadie y a los dirigentes de ambos clubes, a los que pedía en cada reunión ser constructivos y despojarse de toda rivalidad antes de tomar la palabra. “Todos estamos aquí porque queremos a Almería y amamos el fútbol”. Rojas, me contaba que el tema cada día se complicaba más pero “lo vamos a sacar adelante entre todos”

Rojas no lo pudo ver, pero lo dejaba todo resuelto. Le entregó a su amigo Santi (el alcalde Cabrejas) un balance de gestión que cristalizaba meses después con un apretón de manos y una foto de familia que el concejal de Deportes tuv0 que ver desde el cielo porque el verano anterior le falló su corazón.

Rojas, Salustiano Polo y Gregorio Mollejo cuando venían a la SER lo tenían muy claro y como dijo Gregorio: “El Chiquitillo (Rojas) lo va a conseguir”. Dicho y hecho.