Ha muerto el mítico Ufarte

En la madrugada de este domingo nos ha dejado para siempre el mítico Ufarte. Aquel centrocampista que llegó siendo un niño desde El Parador a la Agrupación Deportiva Almería con la que viviría tres ascensos.

Antonio Martínez Ufarte fue el inventor de "los trancazos", sus clásicos remates que botaban antes de llegar el portero rival y entraban en la portería. Su fuerza le daba para subir y bajar en la medular y fue Ricardo Martínez Fondo, el que le enseñó las artes del centro a la cabeza de Gregorio, Rojas y Rolón para dar las mejores asistencias. Jugaba de centrocampista y fue reconvertido a central.

Ufarte pasó por el fútbol destacando por encima de todos debido a su corpulencia y a ir sobrado de centímetros para llevarse los balones de cabeza con facilidad. Hizo una buena carrera en el Almería pero no ganó dinero.

Tras desaparecer el Almería afrontó una nueva carrera en los clubes de la provincia hasta que llegó el momento de reaparecer de rojiblanco con el Polideportivo de Pepe Meca donde Ufarte también dejó su sello.

Luego llegaría el Poli Ejido y su etapa de jugador veterano demostrando siempre sus dotes de buen pasador y sus famosos "trancazos" que tanto le daban al equipo.

Ufarte dejó huella en todos los vestuarios donde militó por se un tipo amable y cercano que siempre regalaba una sonrisa. La prensa deportiva le adoraba porque siempre ayudaba en la entrevista y sus paisanos de la barriada roquetera le llevaban en los Altares ya que Ufarte hacía gala de ser de "El Parador".

Antonio Martínez Ufarte llevaba tres años luchando contra la enfermedad que se lo ha llevado el último día de mayo en plena madrugada. Lo ha intentado hasta el final el menor de 8 hermanos de una familia muy querida en la barriada roquetera.

En el Tanatorio de Las Cabañuelas de Vícar se encuentra Ufarte para que sus amigos y sus ex-compañeros le den el último adiós. La Misa será a las 5 de la tarde en la Iglesia de la Asunción de El Parador.

Nos ha dejado un grande del fútbol almeriense, sus hijos Antonio y Mireya, no paran de atender a los amigos de papá. Antonio también juega al fútbol (a los cuarenta) defendiendo los colores de la U. D. Roquetas.

Trasyectoria deportiva:

Las primeras patadas al balón las daba Ufarte en su barrio de El Parador, pero su primer club federado antes de la edad juvenil fue el Aguadulce del que salió directamente hacia la Agrupación Deportiva Almería de la mano de Florencio Amarilla.

Siendo juvenil el Almería le cedió una temporada al Pavía, luego al Ubeda y regreso al club rojiblanco con el que llegó a ascender a la Segunda División. Tras una falta de entendimiento para renovar con el equipo de Enrique Alés se marchó al Melilla.

Salir de la provincia le dio un caché importante, firmando con posterioridad en el Ciudad Real y en el Orihuela.

Una llamada del Poli Almería le hizo dejar la entidad amarilla para ayudar al club de su tierra del que saldría para militar en el Polideportivo Ejido y de allí a sus orígenes de El Parador, donde colgó las botas.