Los récords de Gomes llegan a Portugal

José Gomes y la UD Almería se retroalimentan. El entrenador suena cada vez con más fuerza en su país Portugal, que se hace eco del proyecto de Turki Al-Sheikh para llevar al club a la máxima categoría. El capitán del barco es una persona humilde, que vive su primera experiencia en el fútbol español. Sus magníficos resultados, una innovadora política de rotaciones y su sintonía con el vestuario han despertado el interés del Diario A Bola, que le ha dedicado un especial. Explicó cómo se fraguó su fichaje por el Almería: “Estaba en Madeira en una cena de despedida la temporada pasada cuando recibí la llamada con la propuesta. Hablé con el presidente del Marítimo, que no planteó ningún problema, y ​​acepté”.

Una de las claves de la gran campaña del Almería es el vestuario. Aunque unos jugadores tienen más minutos, el resto no se siente desplazado, sino que en cualquier momento pasan al once: “El grupo se fortaleció porque todos se sintieron parte de la solución. Las cosas van bien, todavía no hemos llegado al nivel que queremos, pero nos estamos acercando cada vez más y seguimos luchando”.

Aunque es un técnico que no para de llevarse elogios, mucho dulce pica diente: “No me engaño y les aconsejo lo mismo a mis jugadores. Siempre les digo que tengan cuidado con los cumplidos. Estamos contentos con lo que hemos hecho hasta ahora, pero eso no puede distraernos, ganar un partido de inmediato pertenece al pasado, y si nos relajamos ya sabemos lo que nos pasa”.

Humildad
En sus peores momentos con el Almería, tanto en el Play Off de la Liga anterior como en el inicio del actual, mantuvo la calma y siguió confiando en su libro futbolístico y en sus hombres. El tiempo le dio la razón a Gomes: “No sé si soy coach de moda, solo sé que sigo trabajando de la misma manera, consciente de que nada se puede conseguir solo, todo es fruto del trabajo en equipo. En el fútbol todo pasa muy rápido, ganamos un partido y nos tratan bien, perdemos el siguiente y todo cambia. Los años que he dedicado al deporte me enseñaron a ser cauteloso”.