Apareció el José Carlos Lazo que todos esperan. El extremo gaditano de la UD Almería fue clave en La Rosaleda asistiendo a Lucas Robertone y marcando un golazo desde larga distancia para ampliar las diferencias en el luminoso. No le pesa la responsabilidad y reconoció en la radio oficial del club que era muy especial vivir un partido así. "Feliz por volver a marcar y por el equipo, que se lo merecía. Tenía claro que iba a pegarle a portería y por suerte me salió bien". Reconoce que en el vestuario solo pensaban en la victoria, siempre dentro del orden que les pide José Gomes, sobre todo con el reciente escándalo del VAR en casa con el Leganés: "Nos dolió mucho y fuimos con rabia. Tenemos fe en el compañero". Esos puntos ya no pueden volver al casillero rojiblanco y no pueden perder más energías en los errores arbitrales.
El Almería no salió revolucionado ante el Málaga y a raíz del orden táctico empezó a fraguar la victoria, esperando el error del adversario y sacando posteriormente su calidad en los metros finales. Lazo apuntó que ha llegado en un gran momento de forma al tramo decisivo de la temporada: "Me encuentro muy bien físicamente. Apoyo al equipo en lo que me pide y tenemos que seguir porque nos quedan diez partidos. Con lo que pasó con el Leganés nos fuimos muy dolidos y queríamos ganar en Málaga para olvidarlo cuanto antes".
La lucha por el ascenso directo todavía no está cerrada y el Almería no se va a rendir mientras queden opciones matemáticas. Un aviso a navegantes para Espanyol y Mallorca, que ahora mismo tendrían el billete a la máxima categoría en su bolsillo: "Nosotros miramos cada jornada, hacemos nuestros deberes y los demás seguro que pincharán para ascender directamente. Segunda es una categoría muy diferente a las demás, sabiendo que cada partido es difícil, pero no imposible".
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