Punto y final al segundo proyecto de Turki Al-Sheikh en la UD Almería. El barco zarpó de puerto en septiembre con una tripulación joven, inexperta en algunas batallas deportivas; llegó a soñar con un ascenso por la vía directa e incluso con el campeonato, pero la llama de la ilusión se fue apagando desde los camarotes. Los errores se repetían o incluso se agravaban, el Girona te sacó de la semifinal del Play Off en cinco minutos y solo pudiste llorar de impotencia entre los aplausos de tu afición, una hinchada que ha estado muy por encima del equipo, y eso que solo pudo entrar una vez al Mediterráneo y en la cifra de 1.500 espectadores. Lo de la vuelta con el Girona no sorprendió. De hecho, los visitantes sacaron de esquina hasta tres veces en los primeros compases, aprovechando la fragilidad y la falta de confianza de los almerienses.
Desarrollo
Solo Juan Villar, con dos internadas al área, aumentó las pulsaciones del público, y es que un gol tempranero cambiaría la eliminatoria. Sin embargo, cundía el desorden y el Girona juntaba líneas sin sufrimiento, confiados en un esquema, el de Francisco, que le ha llevado de estar a 17 puntos de su rival a situarse a solo dos partidos de la Primera División.
En el descanso llegaron los cambios y todo continuó igual. Cada minuto que pasaba el Almería se iba despidiendo de la temporada y del partido. Poca profundidad, pases erróneos, y ninguna ocasión reseñable salvo un remate de cabeza de Samú Costa que salvó Juan Carlos en la línea. Había que creer, y nadie discute que el vestuario pisó el césped con aires de remontada, pero con las ganas y la actitud no basta cuando el premio de un ascenso te espera. El equipo de Rubi -antes de Gomes-, se ha ido diluyendo de una forma tan rápida que ni siquiera ha tenido opción de soñar con la gran final. Es aquí donde la grada y la ciudad sí han ganado. Espectacular recibimiento a los futbolistas en el Mediterráneo, ni un reproche en el desarrollo del partido, e incluso ovación cuando pitó el árbitro. Los almerienses sí son de Primera División.
Decepción
Esta plantilla, con sus virtudes y defectos, no ha conseguido el objetivo y empieza un nuevo proyecto deportivo. Samú Costa y Manu Morlanes se despidieron del Mediterráneo con lágrimas en los ojos, todo por haber dejado ir un sueño individual, colectivo, y probablemente la ocasión de seguir vistiendo la camiseta rojiblanca. Habrá muchos cambios en la estructura deportiva para afrontar la campaña 2021-2022. Rubi llegó y encontró un vestuario no tan unido, fallos impropios de la categoría y un Play Off en el que cuando se quisieron dar cuenta ya estaba con un pie y medio fuera. Ahora es tiempo de análisis, reflexión y actuación, porque Turki Al-Sheikh lleva dos proyectos en el club y se ha quedado en la orilla.
Impotencia
El Girona, más asentado, confiado y trabajado, pasa a la final gracias a un trabajo espectacular de Francisco y su cuerpo técnico. Mientras una ciudad aspira a lo máximo, en Almería ya se pone la primera piedra de un nuevo equipo. Ya hay un hombre a los mandos, que es Rubi, y falta formar una nueva tripulación, porque la 2020-2021 no ha llegado a la meta. La afición ha dado una lección de saber estar impecable. Siempre creyó. Ahora borrón y cuenta y que Turki no pierda la ilusión después de dos duros varapalos.
FICHA TÉCNICA
UD ALMERÍA Fernando, Buñuel (Iván Balliu, 45’), Ivanildo, Chumi, Centelles (Sergio Akieme, 45’), Samú Costa (Lazo, 69’), Morlanes, Juan Villar (Robertone, 45’), Ramazani, Ager Aketxe (José Corpas, 45’) y Umar Sadiq.
GIRONA Juan Carlos, Arnau, Santi Bueno, Juanpe, Yan Couto, Cristóforo, Gumbau, Franquesa, Yoel Bárcenas, Monchu y Sylla.
ÁRBITRO Ortiz Arias.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/338/ud-almeria/216134/0-0-un-triste-adios-al-sueno