La previa: a curar las heridas abiertas

Tras ganar al Real Oviedo en el Mediterráneo decía Rubi: “quiero ver a mi equipo compitiendo en el Norte de España”, y la prueba del algodón dice que no carbura por esta zona del país donde los conjuntos suelen ser más físicos. La UD Almería sale a un gol encajado por partido. Todos sus rivales locales le hicieron una o más dianas. Cartagena, Amorebieta y Ponferradina batían la meta rojiblanca y esta es la peor de las noticias. Con las heridas abiertas de una derrota clave en Ponferrada, toca levantarse en el Sur de Madrid frente a un rival que pisa fuerte en su campo y que conoce como pocos las artes de la Segunda División.

Sala de máquinas
Rubi  sabe que todos los males de su equipo están en la medular. El equipo carece de la compensación necesaria para manejar los partidos y le llegan los contrarios por las bandas y le generan ocasiones de gol. Akieme no tiene ayudas de Lazo y Samu Costa con Robertone no terminan de dar equilibrio al equipo. Los de arriba dependen en exceso de una medular que firmaba su peor partido en El Toralín, a mitad de camino entre atacar y defender. Hoy (21:00 horas), deben dar un paso adelante a todos los niveles.

Tan importante como acertar con la pareja de centrales es para el Almería contar con un centro del campo capaz de dominar los tiempos y no verse superado por los rivales que le ganan todos los duelos individuales. El Alcorcón no permite ni un segundo de respiro.

El entrenador no ha conseguido equilibrar el equipo que vive a golpes de genialidad arriba, pero con falta de juego colectivo, con fases de buen fútbol y otras donde el rival aprieta y le castiga severamente. Hay buenos futbolistas, aunque tras cinco jornadas no ha encontrado el entrenador la fórmula para sumar en esos partidos que se suelen perder en la Liga y no da para ganar.

Acertar
El Almería ha sumado 9 puntos a base de calidad. Sus tres hombres de arriba se bastan para ganar un encuentro pero falta mucho. Rubi tiene que elegir bien y sus jugadores acertar y darle la razón. No vale que Sadiq, Lazo o Ramazani saquen las castañas del fuego porque la Segunda exige mucho juego físico.

Hasta que el entrenador no acierte con un once de garantías los partidos van a estar en el aire y no se puede permitir el Almería dejar pasar las jornadas viendo el ritmo que han impuesto los equipos de ascenso directo y Play Off. Si el Almería tiene delante un rival físico las opciones de sumar se ven reducidas a la mínima expresión como pasó en Lezama y El Toralín.

Concentrados
El Almería afronta el duelo de Alcorcón con las heridas abiertas. No ha tenido tiempo de asimilar la derrota con la Ponferradina. Los errores afloran y Rubi ha salido en defensa de su plantilla en tiempos difíciles. El Alcorcón de Anquela le va a ‘regalar’ a Rubi esos 95 minutos al filo de lo imposible y el Almería deberá responder con calidad e igualando cada disputa de balón si quiere salir vivo del Estadio de Santo Domingo.