Lleva poco tiempo en Almería (llegó el 21 de agosto y tiene 16 años), pero se siente uno más en la gran familia de La Cañada, donde disfruta del fútbol en el equipo juvenil que compite en la Segunda Andaluza que entrena Israel Polo.
El pequeño Joan es extremo derecho, bajito y el parecido con su padre es muy grande; se parecen hasta en los andares. Joan lleva el fútbol en las venas, como su padre y resulta que su papá es Rubi, el entrenador del Almería.
LA VOZ y la Cadena SER hablaron con el pequeño Joan en el Carrusel Deportivo: “Me divierto jugando al fútbol, estoy con mis amigos; estamos muy bien en Almería”, comenta un Joan que también tiene hasta la mirada del padre. Son como dos gotas de agua. ¡Tienes la misma mirada que tu padre! (risas...), “eso dicen, sí, sí, es verdad, nos parecemos mucho”.
Sois de Vilasar de Mar, ¿cómo es? “Es un pueblo grande, donde tengo la familia y todos los amigos, pero estamos ahora muy bien en Almería”, dice el pequeño de Rubi, que, como todos los niños, sueña con ser futbolista en el futuro.
“Donde va mi padre, yo voy detrás; donde entrena él, yo juego”, dice. Joan se sincera: “Mi padre siempre respeta las decisiones de mi entrenador y si me viene a ver, luego me corrige los errores”, comenta.
Sueña con llegar lejos en el fútbol: “El objetivo y el sueño de todos los niños es llegar a la cima en el mundo del fútbol ¿no?. Yo lo intento y ya veremos lo que pasa en el futuro, en los próximos años”. Va al grano y dice que juega donde lo ponga Israel Polo: “Me adapto a lo que me diga mi entrenador, donde él me ponga. Veo que es un gran técnico y creo que nos ayuda mucho a todos los que formamos la plantilla de La Cañada”, explica Joan.
Las cosas claras
El fútbol y los libros, ¿cómo llevas los estudios? “Bien, siempre saco más o menos buenas notas y casi nunca suspendo trimestrales”, responde el pequeño de Rubi. Como su padre, es un apasionado del fútbol: “Veo con él la mayoría de los partidos por la televisión, él es entrenador las 24 horas del día, siempre está muy metido en el fútbol, con los partidos, no para...”. Cuando Rubi estuvo en el Betis, Joan jugó en el Bormujos y “cuando estuvo en el Huesca, estuve en el infantil del Huesca”.
Cuando su padre pierde "trabaja todavía más para intentar ganar el siguiente partido”, comenta un Joan que espera que el Almería suba a Primera, “aunque es difícil, lo dará todo para llevar a la ciudad donde se merece, a Primera División”. Palabra del otro Rubi, un niño de 16 años con la cabeza muy bien amueblada.
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