LA CRÓNICA: Almería llega al cielo del fútbol

Una maravilla llamada Almería. El ascenso a Primera tenía que ser así, pendiente de otros campos, sacando la calculadora, rezando para que el Alcorcón o el Eibar dieran el empujón. Alrededor de las diez de la noche del 29 de mayo de 2022 una provincia entera se va al cielo del fútbol tras un día histórico en Leganés. El análisis del partido a la basura, da igual si el equipo estuvo horrible en defensa o si no se acercó tanto como se esperaba a la meta de Riesgo. Las tácticas, las estadísticas, los cambios, eso ya no interesa a nadie.

Fiesta
Los héroes de la tarde se pintaron de verde en el campo y de rojiblanco en la grada. La presencia del ministro Turki Al-Sheikh como uno más en la grada animó todavía más a una hinchada que madrugó para arropar a sus deportistas en el choque del año. El bloqueo futbolístico fue total y este ascenso se logró por empuje, por corazón. Era el momento de dar carpetazo a tres temporadas muriendo en las aguas pantanosas del Play Off. Había que subir y de la forma más increíble.

Destino
El enemigo número uno del Almería hace 24 horas era el Alcorcón, ese equipo que dinamitó la fiesta que había preparada en el Mediterráneo, pero el fútbol a veces te devuelve lo que te quita y han sido de nuevo Fran Fernández y Gio Zarfino los que se ponen en el escaparate. El Valladolid goleaba al Huesca, el Eibar empataba en Santo Domingo y el Almería tampoco pasaba del 2-2 en Butarque con los goles de Ely y Sadiq. Había que ir a por el tercero o esperar a que Alcorcón o Eibar marcaran. Pues tuvo que ser el equipo amarillo el que rompió la quiniela. Se cantó el gol en Leganés incluso más que el 2-2 de Sadiq. Era la llave para ir a Primera, el golpe maestro, el giro a una historia que miraba fijamente al Play Off.

Lo demás queda para las páginas de oro del deporte almeriense. Con el pitido final invasión de familiares de los jugadores, Turki saltando por el campo con Mohamed El Assy y toda la plana mayor de la entidad, lágrimas de emoción en los graderíos, Dyego Sousa fumando un puro... El mejor final para la fiesta del ascenso. ¿Qué sería de este Almería si no pone el corazón de su gente a mil por hora?. Esta plantilla quería subir a toda costa, le echaron un cable a ocho kilómetros de distancia y cierra el libro de la temporada de Primera.

Héroes
Desde el primero al último aficionado, del que más juega al que menos, Almería es de Primera y eso ya no lo borra nadie. Disfrutar el momento, en especial los más jóvenes de la casa que están viviendo el segundo o quizá el primer ascenso de su vida. Y lo mejor es que con Turki se puede esperar cualquier cosa. Derribada la puerta de la élite este Almería avisa a los grandes.