Turki es de Almería

No tengo dudas. Fueron 5 horas inolvidables de radio en la Cadena SER con una fiesta que ha superado a los ascensos de Emery y Javi Gracia. Uno tenía sus miedos por todo lo que se había anunciado y ha sido la mejor.

En organización un diez por parte de la policía que supo abrir paso al autobús del Almería por la ciudad cumpliendo los horarios para que aquellos que estaban en el Estadio no se desesperaran.

En Alcaldía de lo más sencillo. Los políticos cercanos y los jugadores y e CEO muy entregados a las autoridades de la ciudad. Todo salió de maravilla. Todo.

Parafernalia

Tanto se habló de la fiesta, no fiesta, contra el Alcorcón que me imaginaba algo de otro mundo y la realidad es que fue de lo más sencillo y por ello de lo más cercano a los aficionados. Para ellos era.

Me imaginaba un grupo raro, raro y la canción de Pilar y Guillermo a la guitarra llegaba a los corazones de los almerienses en una noche que empezaba a lo grande. Nada de extravagancias y todo 'verigut'.

Las calles

Si con Emery y Gracia la calle fue desordenada en la era Turki se midió al milímetro todo lo concerniente a los horarios y nadie se quedó sin ver y casi tocar a los futbolistas del Almería.

Muy cercanos con los aficionados los jugadores demostraron que la Primera no está reñida con la sencillez de unos grandes profesionaes: parecían todos de Almería.

El Estadio

Cuando se apagaron las luces me eché a temblar esperando que apareciera un bicho raro desde el túnel de vestuarios y me quedé prendado de todo lo iba saliendo.

La actuación musical justa y fantástica. Los jugadores de uno en uno mostrándose como son a sus aficionados y el entrenador como si estuviera en su casa. Y eso fue la fiesta, esa fiesta que todos los almerienses llevamos dentro la vivimos en el campo.

Turki vuelve a dar en la diana y toca nuestro corazón.

Nada más almeriense que celebrar a nuestra manera.