Las pachangas

Para los más jóvenes si buscan en el diccionario encontrarán en esta palabra algo así como una danza cubana o un compendio de cosas, hay otras definiciones pero en el Kiosko Amalia todo el mundo sabe de lo que hablamos.

Hoy con las nuevas tecnologías cuando la Cadena SER hace un exterior de radio se le llama bolo y antes de ello a los partidos amistosos de la pretemporada se les llamaba BOLOS.

Me niego a denominar de esta forma a esos encuentros que desde los tiempos remotos de nuestro balompié rojiblanco se ha venido denominando como una pachanga. Como decía el Mago Juan Antonio Román a Pepe Meca: “Prepara cuatro o cinco pachangas antes de la Liga”.

Amistosos y torneos

Los partidos de pretemporada son encuentros amistosos que solo valen para la puesta a punto y ver el nivel de los jugadores tras las primeras cargas de trabajo. Amistosos primero y Trofeo de Feria después era la norma en Almería. Y en tiempos de la Agrupación el Torneo REMASA.

Los más viejos del lugar saben del valor que tenía aquel torneo de los Requena y Martínez Sociedad Anónima con los mejores equipos de España jugando en la Feria de Almería. Aquello no eran pachangas y se vivían dos noches de fútbol de primer nivel.

La prueba del algodón

En estos partidos aparecen las primeras valoraciones de los entrenadores y los dirigentes. Los equipos muestran sus valores y sus carencias. Tras las pachangas se hicieron grandes fichajes en nuestros Almerías.

Los entrenadores se cubren las espaldas si no ganaron ni uno con aquello de: “solo son pruebas que no valen para nada”, dicen, para no quedarse con el culo al aire porque no han dado ni una y el fichaje bomba les salió rana.

Escaparate

En las pachangas del Mago Román vimos a grandes futbolistas que brillaron en el Torneo de Verano y de ellos jamás se supo en la Liga. Como también vimos a jóvenes valores que con solo unos minutos se pegaron como garrapatas a la titularidad.

Las pachangas dan para mucho en los veranos y las prefiero a esas definiciones de bolos que suenan peor. Me quedo con el verbo sabio del Mago Román que en esto del fútbol siempre llamó a las cosas por su nombre.

Para que no se pierdan, el partido en Inglaterra es literalmente una pachanga.

Las pachangas no se le han dado bien al UD Almería.