Aroma de partido grande

Un partido de fútbol es tanto más grande cuando más importantes son los puntos en juego. Este miércoles visita el reciento rojiblanco el Getafe, que puede no parecer un rival de alta alcurnia, pero este duelo ante los madrileños es de vital importancia y máxima trascendencia para el Almería porque se trata de un contrincante directo en la lucha por la supervivencia y porque es el duelo de la despedida del 2022 del equipo ante su afición ya que los almerienses no volverán a jugar como locales hasta el 2023.
    

La jornada 13 para el Almería ha respondido a los temores de sus hinchas más supersticiosos ya que ha sido uno de los tres equipos de la zona baja de la tabla que no han puntuado . Los tres lo han pagado muy caro porque otros siete han visto incrementado su bagaje de puntos en menor o mayor medida.
    

Al Celta la derrota en su estadio frente a Osasuna le ha llevado a quedarse con 11 puntos y le ha condenado a la tercera plaza de descenso. Al Elche le ha confirmado como colista le deja a 7 puntos de la salvación y se ha comido al tercer entrenador del curso.
    

El Almería, el tercer fracasado de la décimo tercera jornada, se mantiene fuera del infierno pero ha visto reducida a sólo dos puntos su diferencia con el infierno y observado como Mallorca, Valladolid y Rayo se le han escapado. Todo ello por obra y desgracia de una lamentable trayectoria de los de Rubi como visitantes que e colocan como el peor de la categoría cuando de jugar lejos de su gente se trata, incluso el colista ha mejorado sus números fuera de casa.
    

Así las cosas está claro que los partidos de casa adquieren el carácter de finales ya que son los que lo mantienen vivo en la clasificación. Para este Almería de Rubi la responsabilidad cuando actúa en casa es máxima y la tensión de sus encuentros como local se ve elevada a  la máxima potencia.
    

Ganar al Getafe supondría consolidarse en la zona tranquila de la tabla con 16 puntos y afrontar el parón de casi dos meses con la sensación del deber cumplido. Perder puede incluso meter al equipo en la zona de descenso. Pase lo que pase le tocará tomar las riendas de la dirección deportiva para reforzar el equipo de cara a la segunda y decisiva etapa de la Liga.
    

Para recibir al Getafe sólo tenemos una baja, la del central Kaiky sancionado con un partido por acumular cinco cartulinas amarillas. El equipo dejará atrás el sistema de tres centrales y dos delanteros que tan pobre rendimiento le dio en el Camp Nou y volverá a defensa de cuatro. Babic formará pareja con Ely y Pozo puede volver al lateral diestro. En el doble pivote se mantendrá Robertone disputándose César de la Hoz y Eguaras la segunda plaza. Por delante los tres mosqueteros del equipo, Baptistao, Melero y Embarba, que desde que llegaron le han cambiado la cara al bloque. Arriba recuperará su plaza el pichichi del equipo, El Bilal.
    

Por su parte el Getafe llega a este choque con una ventaja de un punto sobre los nuestros, pero con la particularidad de venir siendo mejores fuera de casa, donde han sumado 8 puntos que en su estadio.
    

En el Getafe son bajas por sanción el extremo Portu y los defensas Gastón Álvarez y Domingos Duarte, por lesión no podrá jugar Angileri y Arambarri, pero tiene muchas opciones de recuperar a Djené y Damián. Su mejor artillero es el turco Enes Unal autor de 4 goles y dos asistencias. Será la referencia ofensiva de los azulones en Almería.
    

El partido será arbitrado por el Muñiz Ruiz un colegiado de Pontevedra que cumple su segunda campaña en Primera y con el que el Almería ha cosechado derrota tras derrota. Pitó el duelo del Benito Villamarín donde los nuestros cayeron por 3-1. En la campaña 2020-21 dirigió dos partidos al Almería, ambos en el Mediterráneo frente a Mallorca y Rayo, perdiendo ambos choques por 0-1. Cabe esperar que se cambie la racha de este joven y prometedor árbitro. En el VAR estará Iglesias Villanueva.