El Almería guarda silencio

La imagen de Rodrigo Ely corriendo hacia el defensa del Heart escocés, Cochrane, recuerda a aquella carrera del brasileño Jonathan Silva corriendo hacia el vestuario en aquel partido ante la Ponferradina. Aquella estampa del lateral izquierdo dejó tocada la imagen del Almería, pero aquello fue en tiempos de Segunda División.

Ahora, con el Almería en Primera División todo es diferente y hay que tener mucho cuidado con todo lo se hace porque la repercusión que tiene la Liga de la Estrellas no es la repercusión de la categoría de plata del fútbol nacional. La Primera División tiene muchas cosas buenas, pero hay que tener mucho con lo que se hace para no manchar la imagen del Almería como club, y el comportamiento del defensa brasileño Rodrigo Ely no parece la más correcta y menos cuando lo que se estaba jugando era un partido de carácter amistoso en la localidad de Coín.

Han pasado las horas y el Almería no se ha pronunciado, salvo la información publicada en la web oficial del Almería, y en ese sentido ha señalado lo siguiente: “La tangana sobre el césped derivó en discusiones sobre la zona de banquillos, en el que el técnico del Heart mandó a sus jugadores a que se fueran al vestuario porque no quería seguir jugando. Así se lo traslado al árbitro que, una vez habló con las dos partes, lo comunicó con la señal oportuna. Final anticipado”, señala el club. Ni el entrenador Rubi un ningún futbolista del equipo rojiblanco se han pronunciado sobre la acción del brasileño Rodrigo Ely ni sobre la tangana que se produjo tras la acción del  defensa central del Almería.

En cambio, el club escocés del Heart, sí se ha pronunciado sobre los incidentes que se produjeron el domingo en la Ciudad Deportiva José Burgos Quintana de la localidad malagueña de Coín. “Estábamos jugando el partido, era un partido muy competitivo, y de repente en el lado más lejano hubo una entrada de Alex que pensé que era una entrada normal, pero todo el infierno se desató con los jugadores corriendo alrededor”, ha señalado el entrenador al equipo escocés a Heart TV.
También ha comentado que “el árbitro perdió totalmente el control. Había unas 60 personas en el campo. Un poco de caos y pensamos que al ser un partido amistoso y con varios lesionados no tenía sentido continuar porque la tensión era muy alta, por decirlo de alguna manera”.

Directo

Y para cerrar su reflexión en la televisión del club afirma: “Vienes a jugar estos partidos y tiene que haber un nivel de competitividad, pero hay una línea que no se puede cruzar y se cruzó varias veces y el árbitro no tuvo control. Así que pensamos que no tenía sentido... Hemos jugado 45 minutos y ha sido un buen entrenamiento y hemos jugado hace un par de días, así que seguimos adelante”, recuerda Robbie Neilson.