La prueba del algodón deja mal parado a ese Almería al que no le preocupa "dejar la portería a cero", como dice su entrenador. Solo el Getafe no perforó la portería del equipo rojiblanco en la última jornada antes del parón.
Meterle gol al Almería en Primera ha dejado de ser noticia y en sus dos últimas salidas le metieron cuatro repartidos entre los dos de Mestalla y otros dos en Vallecas. Al menos en Valencia se sumaba un punto.
Las cifras dejan claro que el Almería encaja 1,55 goles en cada partido con independencia de los que salgan a defender la portería y hasta Pacheco frente al Villarreal en su única titularidad encajaba dos goles.
Coladero
Los entrenadores dicen que atacan y defienden todos pero las cuentas sea como sea dejan mal parado al equipo de Rubi que no es capaz de encadenar dos victorias y sigue encajando goles en todos los partidos menos uno.
No se defiende bien y cualquier error se paga muy caro. Han podido ser muchos más los goles encajados pero Fernando ha evitado la sangría en muchos de los partidos con paradas de antología.
El entrenador
Cuando a Rubi se le pregunta en la sala de prensa por los goles en contra y eso de dejar la portería a cero dice que "ganando 3 a 1 no tiene tanta importancia", pero uno mira al Mallorca y ve como defiende y se le ponen los pelos de punta.
El carácter del Real Mallorca es el reflejo de su entrenador y el que no defiende no juega con Javier Aguirre. No se trata de comparar pero el Mallorca ganando cuatro partidos se queda en Primera y el Almería está en peligro.
A gol y medio por partido todo es más difícil.
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