“Corregiremos un Estadio frío y antipático”

"Corregiremos el Estadio frío y antipático que tenemos para jugar al fútbol". Fueron las palabras hace casi una década de Miguel Ángel Ramírez, presidente de la UD Las Palmas, cuando anunció que el Estadio de Gran Canaria eliminaría las pistas de atletismo. Una demanda de los aficionados que pasaron del calor del viejo Insular a la lejanía de la instalación de Siete Palmas. Curiosamente, los amarillos y la UD Almería se miden en un amistoso y los proyectos de remodelación de sus Estadios se parecen.

En el caso de Las Palmas, el 11 de noviembre de 2014 comenzó una reforma que consistió en la desaparición de la pista de atletismo y la remodelación del anillo inferior del graderío, acercándolo al terreno de juego unos 20 metros de los que le separaban antes de esa obra. Solo queda por culminar la aproximación de la grada Naciente, cuyos vestuarios están debajo.

Recorte

En datos, los aficionados canarios pasaron a ver el fútbol mucho más cerca. La Grada Curva pasó a 22 metros (desde 42,30), y la Tribuna y Sur fueron a solo 7,30 metros (desde 40 de la ubicación original). La Grada Naciente será la última en ejecutarse -aún no hay plazos- y quedará a 5 metros de la línea de fondo, anunció también el consejero aquel año.

Grada Naciente

"Esa grada tiene unas características muy concretas y diferenciadas. Todo el resto del Estadio, en el anillo superior, se mantiene como actualmente. La mayor dificultad del proyecto es acercar las gradas sin bajar el nivel del campo de juego. Se montarán unas gradas sobre otras, aprovechando los asientos que quedarán debajo. Todo se realizará con módulos prefabricados, no con gradas supletorias", explicaron en su momento. Y así fue, la parte alta de las gradas sigue, como ocurrirá en el Mediterráneo.

Estadio Mediterráneo

Esto quiere decir que el proyecto del Almería tiene similitudes, como mantener la parte alta de las gradas originales y construir otras debajo para acercar el terreno de juego, aunque la gran diferencia con Las Palmas es que los canarios decidieron no hundir el césped, mientras que la idea rojiblanca sí es bajarlo 11 metros. 

Con capacidad para 32.400 espectadores, el Estadio de Gran Canaria fue de los últimos en eliminar las pistas de atletismo, concretamente en la temporada 2015-2016. Ahora lo está haciendo el Real Mallorca. Para el retorno a Primera División, la entidad tiene que instalar una nueva iluminación -venía pagando multas en el curso anterior- y acometer algunas mejoras para competir en la máxima categoría.

Gran Canaria y Mediterráneo, así como Son Moix, van a tener patrones parecidos porque no van a perder parte de sus sus gradas originales. Al fin y al cabo el objetivo es el mismo: tener un campo de fútbol con los aficionados cerca del césped y no en la lejanía de las pistas de atletismo.