LA PIZARRA: Moreno debe cambiar el dibujo

Salió en el minuto 73 para suplir a Embarba, que no había estado al nivel que ofreció frente al Real Madrid, y fue determinante. Ello suponía que a partir de ese momento la UD Almería iba a disponer de dos arietes, aunque Luis Suárez retrasara algo su posición. Podía parecer una decisión arriesgada, y lo era, pero también estaba claro que se trataba del único camino que podía llevar a los nuestros a inquietar seriamente a Ledesma. Koné cambió el encuentro.

En su primera participación advirtió a Fali y Luis Hernández que su estado de relativa placidez llegaba a su fin. Fijó a los dos centrales amarillos a los que sacó del partido, propició que sus compañeros tuvieran más espacios en el área rival, provocó un penalti clamoroso que no se castigó, participó en todos los lances atacantes de los suyos y demostró que su concurso puede ser vital en el devenir de la competición.

Planteamiento

Precisamente es la presencia en el plantel de dos arietes de lujo como Suárez y Koné, lo que puede propiciar que Vicente Moreno opte por cambiar el dibujo y pase a jugar un 4-4-2 o en su defecto mantener el caduco 3-2-3-1 con el colombiano en la línea de tres.

Sorprendió el técnico rojiblanco dando entrada a Puigmal en el once inicial. No tuvo suerte el catalán que a los 8 minutos fue amonestado y ello condicionó su trabajo en el que la voluntad y las ganas superaron a los aciertos.

Desarrollo

En el primer periodo la posesión fue del Almería que contuvo bien los ataques del rival, favorecido por la poca calidad y acierto en el remate de los delanteros locales, hasta el punto de que sólo dispararon una vez a portería. Sólo la falta de conexión con los puntas y la poca capacidad de desborde de estos, evitó que los indálicos inquietaran a Ledesma.

La expulsión de Édgar, más que rigurosa porque las imágenes no muestran que el defensor tocara al ‘actor’ Ramos, en el minuto 49 ponía el partido en bandeja a los locales. Salió Kaiky para suplirle y convertirse en protagonista no sólo por su buen trabajo en defensa sino por su golazo.

Contra todo

Pero el Almería no se amilanó. Con todo en contra, el arbitraje de García Verdura no pudo ser más casero, el Almería no le perdió la cara al partido y desde la entrada de Robertone y Koné se instaló en campo rival y llevó el temor a la grada del feudo cadista. El esfuerzo y la fe de los nuestros tuvo premio con el golazo de Kaiky que rescataba un punto de oro, con el que estrenaba este apartado su equipo y que llevó a todo el banquillo a saltar al campo para celebrarlo.

Cara y cruz en las decisiones de Vicente Moreno. La presencia de Baba y Lopy en el doble pivote le dio consistencia, aunque el primero debió estar más cerca de los centrales, les faltó conectar con los cuatro de arriba. Sobresaliente a la hora de mover el banquillo, su acierto fue vital para sumar por primera vez en el curso.