Agujero negro en el lateral

El Almería de Vicente Moreno tiene varias problemas muy gordos después de seis jornadas celebradas en el Campeonato Nacional de Liga en Primera División. Está claro que la defensa no termina de cuajar con vistas a encajar menos goles o dejarla a cero en un partido, aunque también es cierto que el mexicano César Montes lleva dos partidos siendo titular y formando pareja con Édgar en el corazón de la defensa rojiblanca.

A los problemas de encajar siempre se une jugar sin lateral derecho puro en las dos últimas jornadas del curso 23-24 en la Liga de las Estrellas. Pubill y Pozo siguen KO y eso es un contratiempo muy importante en el equipo almeriense que no reacciona en el sentido de cerrar la portería en el inicio de la temporada en la máxima categoría del fútbol español.

Mala decisión

Vicente Moreno, ante la ausencia de lateral derecho, apostó por el futbolista gallego Chumi, que es central, dejando sin opciones a Mendes, un lateral derecho que sí jugó la pasada temporada con Rubi como máximo responsable técnico del equipo rojiblanco en el que fue el primer Almería de Turki en la élite del fútbol español.

Pero la opción de Chumi es de urgencia y, como tiende a irse hacia el centro de la defensa, normal por otra parte, no ha sido la mejor decisión del entrenador valenciano del Almería.

Próxima jornada
Así las cosas, y con vistas al partido del próximo martes, a las 19:00 horas, en el Estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante el Sevilla, habría que recuperar un lateral derecho para el choque correspondiente a la séptima jornada del curso en el Campeonato Nacional de Liga en Primera División. Marc Pubill parece que aún no está al 100%, pero el sevillano Pozo sí podría estar listo para el partido ante el Sevilla y donde hay que poner fin a la racha de seis paridos sin lograr el primer triunfo en la máxima categoría del fútbol nacional.

Alerta roja
Mientras, el tema de encajar una jornada sí y otra también ya se ha convertido en el pan nuestro de cada día en el Almería de Vicente Moreno. Van seis partidos y un total de trece goles; un dato para estar más que preocupado en el equipo almeriense. La defensa o el sistema debe cambiar de la noche a la mañana para no sufrir.