La Real Sociedad es un equipo de Champions. No sólo lo es, sino que además se lo cree. Y demuestra esa convicción en noches como la de hoy, goleando y superando al Benfica en una noche de fiesta en Anoeta. Los tantos de Merino, Oyarzabal y Barrenetxea dejan a la Real con 10 puntos y lo convertirán en equipo de octavos siempre y cuando el Inter gane su partido de la noche.
El Benfica salío al partido más mandón y quiso tener el control del balón en los primeros compases, pero antes de que llegara su primera ocasión clara, la maquinaria del fútbol de la Real se puso en marcha. Con el control de los tres del medio del campo y el desborde de Barrene y Kubo en banda, el equipo txuri-urdin dejaba el partido asentado en el minuto 21. Merino primero, de cabeza, Oyarzabal después, tras un error de la defensa y Barrene con una gran jugada individual, colocaban el 3-0 y montaban la fiesta en Anoeta.
Es más, la goleada pudo ser aún mayor. En esos primeros 45 minutos, el conjunto de Alguacil vió como se le anlaban hasta dos goles. El primero, por un contacto de la mano de Merino al anotar el que habría sido el tercero. En el segundo caso, Oyarzabal anotaba el posición de fuera de juego tras un gran centro de Kubo.
Ya en el segundo tiempo, el partido se calmó sobre el verde pero se alteró en la gradas. El colegiado Anthony Taylor tuvo que activar el protocolo de seguridad, rozando la suspensión por el lanzamiento de hasta cuatro bengalas desde la grada de ultras del Benfica. Algunos de los artefactos calleron sobre las gradas inferiores del Reale Arena, dónde suelen ubicarse familias y niños aficionados de la Real. En la previa del partido, ya se habían producido hasta tres detenidos por enfrentamientos entre ultras de ambos equipos.
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