LA OPINIÓN DEL PARTIDO: El único cambio que le queda por hacer a Garitano es a sí mismo. Quitarse de una vez del banquillo porque el club no da el paso y él no va a dimitir. Los cambios de Granada siendo malos como siempre rozaron el ridículo pero como siempre sale por DAZN y dice que "estamos cerca de ganar" y se queda tan pancho y nadie lo cree porque meter a Pozo por Arribas cuando el Granada estaba desarbolado por banda no tiene nombre. Cada cambio de los realizados hicieron peor al Almería ante el asombro de sus fieles seguidores en Granada y de los que lo veían por la televisión. El equipo salió dormido tras el descanso y un solo cambio del Granada bastó para sembrar el pánico en la defensa del Almería. Meter a Boyé era un paso al frente para los locales y la entrada de Melero, Milovanovic y Pozo, quitando a Arribas y dejando a Embarba, demuestra que el entrenador pide a gritos un relevo en el banquillo. No me vale que el equipo "hizo un buen primer tiempo" o que "competimos todos los partidos" cuando vino para ganar y han pasado 16 jornadas sin una sola victoria. Esto solo pasa en el Almería señores, en cualquier otro club se hubiese cambiado eso que se denomina dinámica. Lo de Lopy por Baba ni fu ni fa.
Todo el trabajo de la primera mitad iba a depender de la gasolina del equipo que otra vez fue escasa y sin Jonathan Viera en el campo perdía el rumbo y con Gonzalo Melero no había salida de balón pese a que Pozo y Milovanovic ponen voluntad pero sin la maldad suficiente para hacerle daño al rival. El árbitro estuvo penoso desde el pitido inicial y hasta se comió un penalti a Pozo en el tramo final pero nada consuela a una afición que se ve en Segunda.
No tiene argumentos. No se sostiene el mensaje de competir los partidos ni los cambios que realiza son coherentes porque siempre debilitan al equipo. Con Luka Romero en lugar de meter a Alejandro Pozo igual el equipo hubiese hecho daño al Granada pero da igual porque todo lo que toca lo debilita y al final nos damos cuenta que no hay nivel de Primera División empezando por el banquillo.
No hay nivel
En cada rueda de prensa que da Garitano se nota que no le llega para ganar un partido, ni antes, durante o después. Es como si tuviera claro que le falta gasolina a su Almería y cuando hace los cambios se carga el invento. Le han firmado cinco jugadores y puso a cuatro de ellos a competir pero el quinto lo pedía a gritos y no participó. Luego sale con "estamos cerca de ganar".
Han pasado 25 jornadas y toda Almería sabe que vamos a Segunda como también entendemos que no hay nivel de Primera pero el entrenador parece que tampoco lo tiene en función de los cambios que realiza. Está porque ni el club quiere pagarle lo firmado ni él piensa dimitir. Así de claro.
Sin ideas
Hay que poner ya a trabajar al entrenador del futuro. Que empiece mañana mismo a entrenar y a diseñar el nuevo Almería porque Garitano no acierta y tras el partido de Granada que se pierde por sus malos cambios no tiene nada que ofrecerle al Almería.
En un club al que le sobra el dinero no podemos estar perdiendo el tiempo con un entrenador que no ha cambiado la dinámica, que no gana partidos y que se ha instalado en ese "estamos cerca de ganar" que nos conduce a Segunda División.
Y sigue en el banquillo
Si Mohamed El Assy o Joâo Gonçalves entienden de fútbol deberán tener claro el mensaje de su entrenador en Granada. Los cambios, por mucho cansancio de Viera o Lozano, le dejan a los pies de los caballos. Cualquier equipo le da un repaso a este Granada pero somos el Almería.
Y Garitano dijo echadme a grito 'pelao' rompiendo al Almería con los cambios ante el asombro del rival y de una afición desencantada que carga con la cruz de un tira y afloja entre un club que se quiere ahorrar un año de contrato y un entrenador que no cede a la presión y no va a dimitir.
Los cambios hunden al Almería.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/338/ud-almeria/269981/y-garitano-dijo-echame