La Cañada Atlético con un par

Llegando de un reportaje en el Bar Bola Azul y nada más cruzar la acera de Autocares Ramón del Pino veo el autobús del Almería y me pregunto: ¿A dónde va a estas horas? Decido hacerle una foto y cuando está a mi altura veo con enorme sorpresa que no es del club de Turki. sino de La Cañada Atlético. Me da un ‘subidón’ y salgo detrás de él a las cocheras del Polígono San Carlos, paro al chófer y le digo que aguarde un minuto que quiero hacer fotos del vehículo.

El chófer, tan atento como sus compañeros de Ramón del Pino, me lo pone fácil y me acuerdo cuando un día, jugando La Cañada en el viejo campo de la Federación, en una entrevista el ahora director deportivo me transmitía su preocupación con los niños en los largos viajes.

“Mas importante que formar futbolistas. Más aún que darles una debida educación es la seguridad en el transporte”. No le hice mucho caso y avancé en la entrevista sobre la precariedad del viejo campo; cuando vuelve a las andadas y dice: “Los padres no  están para trasladar a los jugadores por los campos”, y ahí se quedó la cosa.

Para los que no lo sepan les diré que La Cañada Atlético trabaja la cantera como los grandes clubes de España, y no tiene nada que envidiar en su proceder ya que Antonio Ramón ha transmitido todo lo que le enseñaron en el Real Madrid, club al que llegó desde su querido barrio,

Seguridad

No es lo mismo ver en televisión la llegada del Almería a Los Cármenes en su autobús bien decorado, que hacerlo en uno alquilado en Granada. Pero esto no es lo que me llevó a lanzarme a por el autocar de Ramón del Pino. Se me vino a la cabeza aquella entrevista en la Cadena SER y puse en valor lo que será para unos padres dejar a sus niños junto al autobús  del club sabiendo que viajan en gracia de Dios.

El chófer de Ramón del Pino no para un fin de semana ya que La Cañada Atlético tiene equipos compitiendo en Ligas de nivel nacional y regional, y siempre están en la carretera pero con la seguridad de ir en las mejores manos. En La Cañada hace ya muchos años que los padres no trasladan a sus jugadores y salen detrás del autobús orgullosos de ver a sus futbolistas seguros y la imagen del club haciendo que vuelvan la cabeza los vecinos de los pueblos por donde pasan. Es una gran noticia para un club con más de 600 niños y niñas.

Sensación

No todos los clubes tienen las mismas posibilidades económicas y a La Cañada también le cuesta llegar a fin de mes, pero prefieren que falten balones a exponer a sus futbolistas. La seguridad es lo primero y toda la lucha de años realizada por su director de cantera se ve reflejada en ese autobús que para a las puertas de los campos o las ciudades deportivas de Real Betis, Sevilla y Granada, dejando constancia de que son un club con un par, capaz de sacar lo suficiente para competir y para que las familias que integran la entidad tengan las mejores sensaciones cuando viajen, al ver toda la modestia de La Cañada convertida en una gran sensación de entidad deportiva. 

No es fácil la organización de tantos equipos y tantas competiciones. La Cañada en esto siempre ha ido un paso por delante y nada importa el crecimiento controlado, porque se busca dinero y se garantiza que cada fin de semana los niños salgan a competir en las mismas condiciones que sus rivales: antes, durante y después de los partidos. La seguridad es la mejor de las sensaciones para esos padres que echan el domingo en Sevilla, Granada, Córdoba, Málaga o Jaén.

Imagen

A los dirigentes de La Cañada Atlético hay que darles un diez ya que han sabido negociar con Ramón del Pino para pintar de punta a punta uno de los autocares de su gran flota. No me pregunten lo que le ha costado y miremos mejor lo que transmite de bueno para el barrio almeriense y para una ciudad que tiene en La Cañada a uno de sus referentes futbolísticos.

El equipo de la División de Honor de juveniles es el que más utiliza el autobús, que en su interior tiene el mejor equipamiento y desde fuera nada que envidiar al del Almería: por no buscar una comparación más lejana.

Ha merecido la pena salir detrás del autobús de La Cañada porque es un orgullo para Almería tener un club que trabaja la cantera como los grandes de España y que ha sabido copiar todo lo bueno a nivel de imagen.

Conociendo a Antonio Ramón se pueden imaginar el orgullo de entrar en la Ciudad Deportiva del Sevilla en el autobús de La Cañada.

Seguridad, formación y educación.